Gallardón (III), el verso suelto

Publicado el 15 diciembre 2012 por Romanas

 ¿Hasta qué punto un ministro es independiente?  ¿Puede realmente el presidente del gobierno cesar a un ministro que acaba de nombrar sin hacer una remodelación total del gabinete?  Todo esto a cuento de que el tal Gallardón parece estar enloquecido, era el verso suelto del PP precisamente por su moderación, por su templanza, incluso se hablaba de que sus posibilidades presidenciales eran las mayores del panorama político español porque se pensaba que incluso podría aglutinar muchos votos de la izquierda. Y, ahora, que ha alcanzado la que él sabe que es la cima del poder al que podía tener acceso, ha dado rienda suelta a lo que verdaderamente siente y piensa y esto es realmente escalofriante, porque parece que no hay ninguna clase de límites para su ultraderechismo.  Y es lógico, que las cosas sean como son. Gallardón era el ojo derecho de Fraga, entre otras cosas porque era el hijo de su mejor amigo, de su esclavo porque José María Ruiz-Gallardón fue el mejor escudero, el más fiel, el más entregado, de Fraga y éste acogió en su regazo al retoño de su escudero con el mayor de sus afectos. No es, pues, nada extraño que Gallardón sea el más retrógrado de todos los hombres del PP, en realidad no es un pepero sino uno de los primeros miembros de aquella Alianza Popular que creara Fraga para intentar su asalto personal al poder total, o sea, para que le llevara en volandas a la presidencia del gobierno. Es curiosa la tragedia de estos hombres, su vocación, de ambos, de Fraga y de él, de Gallardón hijo, era hacerse con el poder total y nunca lo lograron, Fraga, ya está bajo tierra y Gallardón, desde el punto de vista de ese poder total que otorga la presidencia del gobierno, casi. ¿Casi? ¿Y si Rajoy se viera obligado a dejar la presidencia?  Gallardón aparece como el de más cuajo. Es duro como el acero y se considera signado por los más preclaros de los heraldos del poder, piensa que si no lo ha conseguido totalmente es porque una serie de circunstancias, una de las cuales se llama Aguirre, Esperanza, han hecho todo lo posible por abortarlo. Pero ahora ya sabemos que el verso suelto de la derecha no es sino el más hipócrita de todos, de manera que ahora que ya sabe que no puede llegar más arriba está haciendo todo lo que hubieran hecho su Dios, Franco, el profeta, Fraga, y su propio padre sanguíneo, así como también el político, el padre de su mujer, Utrera Molina, el último ministro del super Caudillo vivo, que no sé si vive con él. De modo que está llevando las cosas mucho más allá de lo que se consideraba posible, es como si hubiera aceptado el más grande de los desafíos: ser más franquista, más fascista, mas nazifascista que todos lo fascistas más grandes de la historia, no hay ninguna meta por retrógrada y totalitaria que él no intente conseguirla, repito, es como si se hubiera vuelto loco y les estuviera diciendo a Franco, a Fraga, a  Hitler, a Mussolini, a su padre y a su suegro, “¿veis cómo todavía se podía ir más lejos en el fascismo, se puede ser más fascista que los mayores fascistas entre los gobernantes, se puede ser más fascista que los más fascistas entre los empresarios, se puede ser más fascista que los jueces más fascistas?Por mucho que rebusqueis en el fondo de la historia no vais a encontrar a nadie más fascista que yo porque me crié en las mismas rodillas de la cabeza que pensaba por Franco y aprendí a venerar todo lo que suponga, todo lo que signifique franquismo, fascismo, porque Fraga, mi Dios, me lo inoculó en vena, para que, si llegaba al poder absoluto para lo que me educaron y prepararon tan cuidadosamente,hiciera lo que ninguno de ellos pudo hacer, a pesar de haber ganado una guerra, haber machacado a todo un pueblo, después, haber sido el cerebro del régimen, y haber dedicado una tan larga vida a luchar a muerte para que el franquismo, el superfascismo de aquel general de generales, quedara para siempre atado y bien atado, porque siempre se puede ir un poco más allá, y eso es lo que yo estoy haciendo ahora, perfeccionar el franquismo que no fue sino el mejor de todos los fascismos posibles?”.