
Con esta receta doy por finalizado el reto que me propuse este 2011, el hacer una galleta (como mínimo al mes). ¡Reto superado!* Para ver las demás galletas del año podéis clickar aquí.

Ingredientes:
Galletas de jengibre y clavo:
- 125 grms de mantequilla.
- 100 grms de azúcar moreno.
- 100 grms de melaza o miel de caña.
- 320 grms de harina.
- 1 huevo.
- 1/2 cucharadita de levadura química.
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- 1/2 cucharadita de nuez moscada.
- 1 cucharada de jengibre en polvo.
- 2 clavos.
Para el glaseado:
- 2 claras de huevo.
- 1/2 cucharadita de cremor tártaro.
- 400 grms de azúcar glass.
- Colorante en gel rojo.
- Colorante en gel marrón.
- Gotas de chocolate blanco.
- Azúcar marrón o azúcar moreno.
Preparación:
En primer lugar prepararemos las galletas para que enfríen y podamos decorarlas. Mezclaremos la mantequilla, a temperatura ambiente, con el azúcar moreno y la melaza hasta que consigamos una masa homogénea, ligera y cremosa. Añadiremos el huevo y lo batiremos todo bien. Tamizaremos la harina, la levadura, la nuez moscada, el bicarbonato y el jengibre en polvo y lo uniremos a la mezcla anterior. Conseguida una masa homogénea separaremos la misma en dos bolas y cada una de ellas la extenderemos, con ayuda de un rodillo, entre dos hojas de papel parafinado o papel de horno; dándole un grosor de 1/2 cm. Pondremos la masa 30 minutos en el congelador, sobre una superficie plana. Una vez pasado el tiempo cortaremos la masa estirada con un cortador con forma de gingerbread (los recortes que nos sobren los haremos nuevamente bola que estireraremos, enfriaremos y nuevamente cortaremos). Hornearemos, horno precalentado, a 180º unos 15 minutos o hasta que estén doradas. Dejaremos que enfríen por completo sobre una rejilla.
Mientras se van enfriando las galletas haremos la glasa. He utilizado la receta de Bea porque me va muy bien con ella. Mezclaremos, con ayuda de un tenedor, las claras con el cremor tártaro e iremos añadiendo poco a poco el azúcar glass mientras vamos removiendo con las varillas. Separaremos la glasa en dos, tiñendo una de ellas con color marrón y la otra con color rojo. Dejaremos reposar 30 minutos en un recipiente tapado (para que no se nos seque) y para que salgan todas las burbujas posibles. Una vez pasado el tiempo la glasa estará lista para utilizar con ayuda de la manga pastelera y de los biberones. Es hora de las manualidades. Decoraremos como aparece en la foto o cómo más nos guste. Primeramente haremos la cabeza del reno, sin los cuernos y dejaremos secar esta parte . Posteriormente haremos los cuernos al reno para poder espolvorear el azúcar marrón sin que se nos pegue en la cabeza del reno. Dejaremos secar por completo y, con ayuda de un pincel, retiraremos el azúcar sobrante. Estarán listas para comer.

Ingredientes:
- 1 naranja.
- 3 cucharadas de azúcar moreno.
- 5 clavos.
- 300 ml de agua hirviendo.
- 2 cucharadas de café soluble.
- 40 ml de ron.
Preparación:
Para la elaboración del café a la naranja, lavaremos la naranja, rallaremos su piel (la cual reservaremos). Exprimiremos la misma y pondremos este zumo con los clavos. Calentaremos el azúcar moreno hasta que se caramelice ligeramente. Al caramelo le añadiremos el zumo de la naranja con los clavos y dejaremos que hierva durante tres minutos, hasta que el líquido espese formando un jarabe. Añadiremos el café, habremos disuelto el café soluble en el agua hirviendo, junto con el ron y lo mezclaremos todo. Verteremos el café en las tazas o vasos de presentación y los decoraremos con la ralladura de naranja.





