El otro día visité a mi amiga Ana, quien está reponiéndose de una intervención quirúrgica. Para mimarla le cociné estas Galletas de nuez que le gustaron tanto, tanto que me pidió la receta para prepararlas ella misma.
Para ella y para ustedes, estos son los ingredientes que necesitarán para realizar en un pim-pam-pum estas deliciosas galletas.
Pocos ingredientes, poco trabajo y grandes resultados: Una combinación interesante que nos permitirá lucirnos sin mayores complicaciones, ya verán. ¿Empezamos?En un bol muy bien limpio, colocá 2 claras de huevo (recordá que no les debe haber quedado ninguna presencia de yemas o no podrás obtener el punto de claras batidas a nieve). Con batidora eléctrica, batilas hasta obtener el punto deseado. Luego, incorporá 100-150 gramos de azúcar orgánica (puede ser azúcar común) y continuá batiendo. Primero, en velocidad baja; luego, en velocidad máxima hasta obtener un regio merengue.
Por último, con espátula, agregá 200 gramos de nueces bien picadas o procesadas.
Con movimientos envolventes lográ una mezcla homogénea sin perder el aireado que lograste con el batido.
Para cocinar las galletas, colocarás porciones del tamaño de media cuchara sopera de mezcla sobre una placa para horno, cubierta con papel manteca o de cocina.En horno suave (muy suave: 110-120° C) cocinalas por unos 20 minutos o hasta que se doren ligeramente. No permitas que se exceda el dorado porque tomarán un gusto desagradable.
Una vez que las galletas salen del horno tienen una consistencia más bien espumosa y algo frágil. Sin embargo, a medida que se enfrían, adquieren una textura crocante por fuera y muy aireada (y húmeda) por dentro. ¡Toda una delicia! Como para comer una tras otra sin parar...
Como les adelanté, una receta exquisita que se prepara en muy poco tiempo - empleando esas claras que nos sobraban y no sabíamos en qué utilizarlas - y nos permite lucirnos con las amigas, las visitas, nuestros maridos o novios, los chicos, los sobrinos, los compañeros de estudio o de trabajo... Una opción para ir variando los sabores es reemplazar las nueces por otros frutos secos siempre muy bien procesados para que se integren con facilidad a la mezcla: almendras, castañas, avellanas, nueces Pecan o de Macadamia.
Último detalle: si no logran que el horno alcance una temperatura bien suave para cocinar las galletas (que, al fin y al cabo, no son más que merengues) sin arrebatarlas pueden dejar la puerta del horno entreabierta para ayudar a que se escape el calor.
Antes de despedirme, quiero agradecer a la revista digital uruguaya Mujer Mujer. Detrás de una gran mujer está ella misma por haber elegido a mi blog para formar parte de su sección Blogueras, donde realizan sus recomendaciones de distintos blogs que les resultan atractivos de acuerdo a sus diversas propuestas. Como podrán imaginarse, siempre es una gran alegría que mi trabajo y mi pasión guste a otros; por ello, me encuentro inmensamente feliz y agradecida.
¡Gracias a ellas y gracias a ustedes por acompañarme cada semana!
Nos reencontramos la próxima. Disfruten, experimenten en la cocina y sean felices. ¡Bon appétit!