Habrá quien se pregunte que cómo estando tan poco a gusto en el colegio me sigo desviviendo por hacer estas cosas. Pero en el fondo sigue siendo igual de sencillo que cuando estábamos a gusto, disfruto cuando veo a los chicos embobados escuchando la historia que lleve preparada ese día, me encanta ver sus caras de alegría cuando me ven entrar con las galletas y lo que más me gusta es ver a mi hijo tan orgulloso de sus padres.
El grado de retorcimiento que haya en el colegio es una minucia comparada con esas satisfacciones. Fijaos que otros años hasta hubo alguna madre que ponía alguna pega a mi asistencia, muchas se apuntaban para dejarnos menos espacio o se callaban la información cuando preguntaba algo como la hora de asistencia. Como resulta que este año se lo podíamos notificar directamente al profe sin pasar por el WhatsApp de madres pues adivinad, sólo fuimos mi marido y yo. Alucinante, verdad??? Pues así son las cosas por aquí, es lo que hay.
Eso sí, para que los chicos participaran en las jornadas interdisciplinares (vamos, la semana cultural del centro..., es que ellos son así de finos, no pueden ser como todo el mundo) allí estaba toda la que podía, para que se las viera esforzarse en preparar los disfraces y en ir a vestir a los niños, en fin, mucho postureo.
* 250 gr. de mantequilla sin sal, a Tª ambiente.* 135 gr. de azúcar super-fina o caster sugar.* 1 cucharadita de esencia de vainilla.* Una pizca de sal.* 280 gr. de harina para todo uso.
Preparación:
- Precalentamos el horno a 175ºC.
- Batimos la mantequilla con el azúcar 2 minutos a velocidad máxima.
- Añadimos la esencia de vainilla y batimos un minuto más.
- Tamizamos la harina.
- Añadimos la harina a la mezcla de mantequilla poco a poco, mientras batimos a velocidad baja.
- Poco a poco vamos aumentando la velocidad hasta alcanzar la velocidad máxima.
- Si notamos la masa muy seca al final podemos añadirle un poquito de leche, pero ojo, sin pasarnos, debemos añadirlas con la cuchara poco a poco.
- Una vez que hemos conseguido la consistencia suficiente como para que el bol quede limpio y la masa no nos ensucie los dedos, toca el amasado.
- Ya bien amasado, estiramos la masa con un rodillo entre dos hojas de papel encerado (de hornear) bien engrasadas (yo utilizo spray desmoldante), y dejo como medio centímetro de grosor.
- Con nuestro cortador le damos la forma deseada y las colocamos encima de un papel encerado sobre la bandeja del horno, hay quien las deja reposar en el frigo antes de hornear, pero yo no tengo esa costumbre, ya que así salen bastante bien.
-Y llegamos al horneado, dependiendo del grosor y tamaño de la galleta necesitará más o menos tiempo, se trata de ir observando, pero para que os hagáis una idea entre 10-15 minutos.
Espero que os gusten estas galletas. La receta es fantástica, no dejéis de intentar prepararla en alguna ocasión, sobre todo para este tipo de galletas decoradas da un resultado estupendo. Muchos besotes y hasta la próxima receta.