La pequeña constructora francesa de coches eléctricos se ha apagado: el tribunal del comercio francés ha optado por una subasta de los activos.
Un golpe duro para el futuro eléctrico europeo y un desaliento para las start-ups de coches eléctricos. Una empresa que ofrecía un coche eléctrico con buenas prestaciones y muy económico. Esta empresa incluso se había visto apoyada por una famosa candidata a la presidencia francesa.
Se ha decidido que no habrán compradores para MIA y que los 1200 clientes de esta empresa van a pasarlo mal para encontrar piezas de recambios para sus coches eléctricos.
Desgraciadamente la dura ley del mercado ha hablado, y la MIA no ha conseguido seducir suficientemente el gran público para alcanzar los volúmenes de venta necesarias a la supervivencia de esta empresa, incluso con una bajada de precio ofertada hace algunos meses.
Hay que reconocer que la ecuación MIA era compleja pues es difícil hacer un margen con un vehículo “low cost” y difícil de hacer volúmenes interesantes con coches eléctricos cuyo mercado apenas empieza a arrancar. El posicionamiento de la marca era una lucha dura de defender e imponer.
Esta prometedora empresa, largamente apoyada por los poderes públicos, ha dado pues su último aliento. El encargado del caso no ha querido retener una oferta de recompra para dejar una oportunidad a la empresa MIA de retomar fuerza. Lo cual se anunciaba bastante difícil.
MIA se apunta pues al cementerio de los pequeños constructores de coches eléctricos (constituidos por Think, Coda, Aptera, entre muchos otros) que hacen un poco más difícil el incentivo de nuevas opciones en el mercado de los automóviles eléctricos. Pero todo no está perdido y todavía quedan pequeñas constructoras que deberán encontrar la fórmula adecuada así como la suerte y aceptación del mercado para salir adelante.
Para los curiosos, una imagen de la curiosa Aptera (que fue producida con apoyo de Google):
Para los clientes de constructoras caídas en el laborioso camino de los comienzos del coche eléctrico, algunos proponen formar asociaciones para la ayuda mutua acerca del mantenimiento y de la forma de conseguir piezas de recambio. Ideas que muestran un apego importante de los usuarios de coches eléctricos a sus vehículos y que a pesar de todos los problemas que encuentra este vehículo novedoso, da una cierta esperanza.
Dejando de lado los lados más negativos de estas noticias, conviene remarcar que hace nada más que 2 años, Tesla no era más que una pequeña empresa. Sin embargo consiguió salir adelante, y juntar suerte y aceptación del mercado como para triunfar.
constructora,mercado,MIA,pequeñas empresas,Tesla