¿Ganar un Goya a la mejor dirección novel ayuda a tu carrera?

En 1989 se entregó por primera vez el premio a mejor director/a novel. Curiosamente ese primer galardón recayó en una directora, Ana Díez, por la película "Ander y Yul". Más curioso aún es que de los cinco nominados, tres fueran mujeres y entre ellas Isabel Coixet por "Demasiado viejo para morir joven". Casi 30 años después, Isabel recoge su segundo Goya como mejor directora por "La librería" mientras que Ana ha tenido una evolución más discreta. Por tanto, ¿qué influencia tiene este premio en tu carrera profesional?
La mejor dirección novel nació con un buen argumento: apoyar a directores jóvenes que presentan una ópera prima de calidad merecedora del reconocimiento de compañeros y público. Treinta años después el resultado ha tenido luces y sombras.
No se puede negar que algunos premiados han tenido una carrera espectacular como Alejandro Amenábar (1996 - "Tesis"), Santiago Segura (1998 - "Torrente, el brazo tonto de la ley"), Daniel Sánchez Arévalo (2006 - "Azuloscurocasinegro") ó Juan Antonio Bayona (2007 - "El orfanato"). Se puede pensar que fue su resultado en las salas y no el premio el que lanzó sus carreras. Y seguro que hay parte de verdad.
Y es que otros nominados que no ganaron el premio, hoy son directores de referencia en el cine español. En 1992, el exitoso Alex de la Iglesia, nominado por "Acción mutante", tuvo que ver cómo el premio recaía en el entonces desconocido Julio Medem por "Vacas". Icíar Bollaín que presentaba la exquisita "Hola, ¿estás sola?" perdía en 1995 con el huracán Agustín Díaz Yanes que arrasaba con "Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto".
Y como ellos tantos otros que se quedaron a las puertas como Javier Fesser, Cesc Gay, Pablo Berger ó Jaime Rosales que se desquitaron más tarde ganando el Goya a la mejor dirección con "Camino", "Truman", "Blancanieves" y "La soledad" respectivamente.
Sin embargo, el triunfo en esta categoría de otros directores como David Pinillos, Mar Coll, Rosa Vergés ó La Cuadrilla pueden haber influído en recibir ofertas para trabajos en televisión o publicidad pero no han vuelto a destacar en el ámbito cinematográfico. De ellos, Mar Coll hace cinco años presentó "Todos quieren lo mejor para ella" con una gran Nora Navas pero su resultado en taquilla fue discreto.
Es difícil determinar un patrón. Posiblemente sea un premio que te aporte visibilidad pero por sí solo no suponga nada. Son múltiples factores los que establecen el futuro profesional de los directores y, quizás, éste sea el de menos relevancia. Taquilla, contactos, versatilidad como guionista y director, paciencia y mucha suerte son los que realmente influyen en la apuesta por un nuevo proyecto. Pero qué bonito es tener un Goya en casa ¿verdad?
José Daniel Díaz