Cáncer. En ésta misma palabra encontramos un sinfín de emociones y ninguna de ellas puede ser positiva: pavor, furia, desesperanza, frustración...
Todos conocemos a alguien muy querido que lo ha sufrido, si no nosotros mismos.
La noticia se recibe entre tristeza, preocupación y rabia por "habernos tocado a nosotros", pero lo cierto es que hoy en día es una enfermedad de lo más común.
El cáncer, la relación con el deporte y la comida
Según la AECC (asociación española contra el cáncer), entre el 75-80 por ciento de los casos podrían ser evitados.
En los países desarrollados encontramos tasas de obesidad, diabetes, sedentarismo, problemas coronarios... que podrían ser evitados con unos buenos hábitos alimenticios y ejercicio físico de forma regular. No debemos bajo ningún concepto abandonarnos, pues estamos siendo candidatos a que en un futuro no demasiado lejano nos puedan diagnosticar éso que no queremos escuchar.
Es cierto que con la alimentación actual, llena de productos químicos, las radiaciones con las que convivimos hace que en los países desarrollados contemos con mayor tasa de cánceres que en otros países en vías de desarrollo, pero... son agentes que no podemos controlar.
No debemos volvernos unos maniáticos y comenzar a buscar en todo causas cancerígenas, pero una forma de evitar toda esta contaminación y posibles daños a nuestro organismo, es eliminar los radicales libres que forma nuestro cuerpo ante la confrontación con estos productos mediante ejercicio físico regular y una alimentación equilibrada. Debemos responsabilizarnos y comprometernos con nuestra propia salud para evitar males mayores a largo plazo.
Consejos para afrontar el cáncer
La cuestión se plantea cuando el diagnóstico no es una hipótesis sino una Tómate tu tiempo para dura realidad. En ese caso, el apoyo psicológico debe ser lo primero que tenemos que demandar. Existen equipos de psicólogos para familiares y enfermos dispuestos a ayudarte y a aclararte cualquier duda. reorganizar tu vida, plantearte qué es lo que quieres realmente, realizar una introspección y por qué no, comenzar a vivir más intensamente cada momento. No es extraño que las personas que pasan por este trance redescubran aspectos de sí mismo que jamás pensaban que podrían existir.
Es importante que también intentes caminar, No es la época donde te puedas plantear hacer una maratón. Ante todo seguir haciendo deporte si formaba parte de tu vida anterior. Intenta seguir haciendo tu vida lo más normalmente que puedas. Sentirte útil así como el ejercicio, debe ser adaptado a cada caso ya que ayudará a que tu cuerpo se deshaga de los radicales libres que tu organismo almacenará tras las sesiones del tratamiento que tu equipo médico disponga que es mejor en tu caso. libera endorfinas que nos resultan muy beneficiosas para subir la autoestima y el estado de ánimo. Habrá días donde esta motivación te va a resultar fundamental.
Otro aspecto clave a tratar es laLos tratamientos de quimioterapia Las personas en este trance puede que incluso desarrollen alimentación. Deberás comenzar a dejan las defensas totalmente a cero; es por ello que debes intolerancias alimentarias o alergias así como celiaquía, intolerancia a la lactosa... debes prestar atención a cómo reacciona tu cuerpo tras la ingesta de cada alimento. Si comienzas a sentirte mal periódicamente tras la toma de cierta sustancia en particular, acude a tu médico y pide que te hagan pruebas. Quizás estés ingiriendo algo que en ese momento pueda resultarte perjudicial. ayudar a que tu organismo se recupere cuidando la alimentación al mínimo detalle. cuidarte como nunca antes lo has hecho.
Por supuesto, deberás anular de tu menú la comida basura, los refrescos, las comidas procesadas, los azúcares y por supuesto el alcohol. Son cosas que todos damos por supuesto; si tienes dudas puedes consultarlo con tu médico y te dirá exactamente lo mismo. Puedo contarlo desde mi propia experiencia: hace varios años, mi propio padre fue diagnosticado de una leucemia miloide aguda en fase terminal.
Mi experiencia con el cáncer
Toda la familia nos trasladamos a Madrid al hospital "Puerta de Hierro".
La asociación extremeña A.F.A.L. (a la cual le estoy tremendamente agradecida), nos proporcionó un piso compartido con más enfermos extremeños. Cada familia tenía asignada una habitación, pero el resto del piso era comunitario.
He de decir que estaba bastante familiarizada con el tema de la alimentación de los enfermos:
Va a ser muy duro que te diga esto de forma tan clara, pero no hay otra salida: únicamente sobrevivían los que comían extremadamente sano. Fue el caso de mi padre, cuya dieta estaba basada en legumbres, frutos secos, cereales integrales (sin gluten), multitud de verduras hervidas o al vapor, caldos vegetales y muchos pescados a la plancha. En cuanto a alimentos cárnicos tomaba pechuga de pollo/pavo e hígado de ternera y huevos cocidos de gallinas criadas en libertad en grandísimas cantidades (por el tema de las plaquetas, nos decían los doctores).
Las frutas siempre se las aconsejaban cocidas y en compotas. Recuerdo que lo que más echaba en falta eran los alimentos crudos. En su estado tan sumamente débil, cualquier gérmen o bacteria podría acabar con su vida, por lo que siempre se lo ponían todo cocinado.
He decir que no todos los pacientes comían así. Había enfermos que mantenían en su menú diario comida rápida, casquería, grasas saturadas... o incluso no era muy extraño ver a personas trasplantadas o siguiendo un tratamiento, que en sus días fueras del hospital se tomaban "un cubata" como cualquiera pudiera tomarse un fin de semana con amigos.
No hay que olvidar, que aunque intentemos hacer vida normal y que nuestro aspecto no refleje a veces lo que llevamos por dentro, debemos asumir nuestra condición y jamás consumir alcohol y ninguna sustancia que nuestro sentido común nos diga que no es correcto consumir.
Debemos Existen alimentos, infusiones... que seguir fielmente todo lo que nos diga nuestro equipo médico y no actuar y tomar determinaciones sin consultarlos, así como tomar parte en tratamientos alternativos sin ningún tipo de control. pueden ayudarte a prevenir el cáncer, pero una vez declarado no debemos bajo ningún concepto jugarnos nuestra salud. Recuerda que el cáncer es una enfermedad que se juega contra reloj: cuanto antes comiences a tratarla, más fácil será que éste no avance.
No pierdas el tiempo, Lo que sí puedes hacer es intentar consumir alimentos con los menos alérgenos posibles de origen biológico así como infusiones, especias, superalimentos y un mayor consumo de frutas y verduras que se han demostrado cada minuto ganado al cáncer es oro. científicamente que ayudan a recuperarnos antes. Todo suma.
"Hoy en día existen evidencias científicas de alimentos con propiedades anticancerígenas, denominados alimentos funcionales, con compuestos bioactivos que tienen una actividad biológica dentro del organismo y que se traduce en beneficios para la salud", explica Alberto Fernández Gutiérrez, director del Centro de Investigación y Desarrollo del Alimento Funcional (CIDAF) del Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud de Granada.
Alimentos con propiedades anticancerígenas
- Té verde: Son conocidas sus múltiples y beneficiosas propiedades, sobre todo debido a sus polifenoles. Igualmente es un potente antioxidante.
- Aceite de oliva: Potente anticancerígeno sobre todo contra el cáncer de mama. Reduce de forma drástica los niveles de determinados oncogenes que están en el 30% de las pacientes que desarrollan una forma muy agresiva de la enfermedad.
- Tomate: Sobre todo por su alto contenido en licopeno. El licopeno reduce de forma significativa la incidencia de cánceres de pulmón, próstata así como del sistema Del mismo modo, la tomatina tiene una alta capacidad antioxidante que evita que las células degeneren.
- Brócoli: Gracias al sulforafano ( reconocido científicamente como un agente quimio-protector contra el cáncer) y a los isotiocianatos presentes en el brócoli, éste puede protegernos de cánceres tan diversos como próstata, colon, mama, hígado, vejiga, huesos, páncreas, piel o leucemia.
- Cereales integrales: Tienen la propiedad de acelerar el tránsito intestinal y arrastras consigo sustancias cancerígenas que se encuentren en el sistema digestivo. Es por ello que se consideran altamente efectivos en los casos de cáncer de colon y de estómago. Al impedir que éstas sustancias nocivas sean absorbidas por el organismo al expulsarlas al exterior, protege del cáncer de mama y de páncreas.
- Cúrcuma: La cúrcuma es el ingrediente del curry que le da su color característico amarillo. Es uno de los antiinflamatorios más potentes que nos brinda la naturaleza. Su principal constituyente es la curcumina. Tiene cualidades antiinflamatorias, antitrombóticas, hipocolesterolemiantes, hepatoprotectoras, antimicrobianas y antioxidantes y anticancerosas. Tiene la gran capacidad de inhibir el crecimiento de gran número de tumores bajo condiciones de laboratorio. Es de gran ayuda en tratamientos de cánceres como los de colon, hígado, estómago, mama, ovarios y leucemia, entre otros. Favorece la eliminación de sustancias cancerosas, ayuda a nuestro cuerpo a producir sustancias anticancerosas como el glutatión y tiene un gran poder antioxidante (en algunos estudios se habla de que es hasta trescientas veces más potente que la vitamina E).
- Granada: Muy rica en antioxidantes. Previene el cáncer de mama. También es muy abundante en ácido cítrico, que es desinfectante y alcalinizante. También cuenta con propiedades antiinflamatorias y astringentes. Su jugo ayuda en el cáncer de próstata y en la osteoartritis.
- Aloe vera: Existen recientes estudios que relacionan el consumo del jugo de aloe vera con la prevención y el ataque de la enfermedad en fases tempranas. Ayuda en el tratamiento de quimioterapia así como curar llagas en la boca, en capas de epidermis del estómago e intestino así como ayudar al sistema inmunológico.
- Soja: No es de extrañar que en los países orientales las mujeres presenten una menopausia tardía. Ésto se debe a su alto consumo de soja, Asimismo, presentan una menos incidencia de osteoporosis.
- Setas y hongos: Han sido utilizadas desde los tiempos más remotos por parte de las civilizaciones orientales. China, Japón y Estados Unidos han realizado estudios que corroboran su efecto anti edad así como anticancerígeno.
He de citar que muchos de los compuestos de algunos alimentos funcionales, son utilizados como base de fármacos destinados contra el cáncer. "los extractos de compuestos biactivos no son tan efectivos como cuando estas sustancias se encuentran en su forma natural como parte de un alimento", apunta el director del CIDAF.
Como conclusión, la mejor medicina para el cáncer está en su prevención . La naturaleza con su son la medicina ideal, no sólo para la prevención de ésta enfermedad que angustia a nuestra sociedad, sino como una alimentación y el ejercicio físico receta para la salud en general y la felicidad.
-Fuentes: AECC, CIDAC, www.efesalud.com.