- 1 Bote de garbanzos pequeño
- 45 gramos de quinoa
- 1 sobre de bacalao ahumado
- 1 patata grande
- media cebolla
- sal
- una pizca de pimienta negra molida
- aceite de oliva
- medio vaso de vino blanco
- 1 litro de caldo de pescado (si es casero, mejor)
- Picamos la cebolla y ponemos a freír en una olla con aceite de oliva. Echamos un poquito de sal y pimienta y rehogamos a fuego medio fuerte con el vino blanco.(unos 7 minutos)
- A continuación chascamos la patata y la echamos con la cebolla y lo mezclamos bien. (chascar: corte que utilizamos para guisar las patatas,introduciendo la hoja del cuchillo haciendo palanca y haciendo que la patata se rompa de forma natural. De esta forma la patata no se deshace y suelta el amidón que espesa el caldo.)
- Añadimos el caldo de pescado y cuando llegue a su punto de ebullición echamos la quinoa. Bajamos el fuego y cuando la quinoa ya lleve unos 12 minutos cociendo, añadimos los garbanzos escurridos y lavados.
- Troceamos el bacalao ahumado y lo añadimos a la olla. Removemos y comprobamos el punto de sal. Dejamos unos 10-15 minutos más a fuego suave y ya tenemos este plato de cuchara diferente y bueno para el frío.