En casa nos encantan los garbanzos, en potaje, con chorizo, con bacalao (pichar aquí para ver receta), con pulpo (pinchar aquí), con ventresca de atún y piquillos (pinchar aquí para ver) etc…. Lo cierto es que lo preparo bastante a menudo. Para cocinar estos platos a veces utilizo los garbanzos secos, que hay que poner a remojo el día anterior, y su cocción suele ser bastante larga y tediosa, salvo que se haga con olla exprés; pero otras veces la comodidad de puede, y utilizo los garbanzos de bote, ya cocidos. Lo único que hago es escurrirlos bien y pasarlos por un buen chorro de agua fría para eliminar el sabor de la conserva. Aunque ya están cocidos, yo suelo cocinarlos unos minutos con el resto de los ingredientes, para que pillen bien el sabor del plato. Lo cierto es que para mí son el invento del siglo. En este caso, para ahorrar tiempo, he utilizado los garbanzos de bote.
Ingredientes
- 1 calabacín
- 1 berenjena
- 3 zanahorias
- 1 puerro
- 1 pimiento rojo
- 2 tomates
- Un bote de garbanzos (540 gramos, peso escurrido)
- 3 dientes de ajo
- 100 ml. de cerveza
- Sal
- Aceite de oliva
- ½ cucharadita (de las de café) de pimienta negra molida
- ½ cucharadita (de las de café) de curry
- 2 latas de ventresca de atún, de 75 gramos cada una (peso escurrido)
Cinco minutos antes de terminar la cocción, añadimos los garbanzos. Como ya he comentado antes, he utilizado garbanzos en conserva, por lo que antes de echarlos en la sartén, los he escurrido bien y los he pasado por un buen chorro de agua fría, para eliminar el sabor de la conserva.