Franck ThilliezDestino, 2011676 págs.Serie: Franck Sharko #4 Sharko y Hennebelle #2
Sinopsis
El cadáver de una estudiante de biología, descubierto en la jaula de un chimpancé. Los restos de una familia de neandertales a los que mató un cromañón, hallados en un macizo alpino. El asesino de niños Grégory Carnot, encontrado muerto en su celda. Un ginecólogo que investiga sobre genética, salvajemente asesinado en su domicilio. ¿Qué invisible hilo une estos crímenes atroces, cometidos con 30.000 años de diferencia?. Una vez más, Lucie Henebelle y Frank Sharko, destrozados por la terrible experiencia vivida se unen para lleva a cabo una investigación sobre la evolución de las especies que les conducirá a las raíces del mal.
Opinión
Tras el final del anterior libro, El síndrome E, tenía muchas ganas de continuar la serie de Franck Sharko, Gataca.
Con un final aterrador del anterior libro en este descubrimos la terrorífica verdad y la caótica situación de Lucie y Franck. Ya no siguen juntos, la mujer ha dejado la policía, y Sharko ha vuelto a la calle tras haber superado por fin su duelo. Sharko tiene un nuevo caso entre manos: la muerte de una estudiante de biología supuestamente en manos de un animal; las cosas no serán lo que se pensaban y se encuentrará dentro de un caso muy enrevesado y difícil con muchas ramificaciones. Mientras Lucie comienza de nuevo a investigar a un tipo que acaba de morir en la cárcel de forma espantosa, por su cuenta y riesgo e irá descubriendo una red terrorífica y maligna que le afectará y atañerá personalmente. Estos dos casos estarán unidos y de nuevo harán que dos personas tan juiciosas como estos dos se conviertan en dos sabuesos y máquinas en conseguir encontrar la verdad aunque sus vidas corran peligro.
Creo que no he contado mucho porque es necesario ir en blanco. Aunque sea la cuarta novela de Sharko, es la segunda donde ambos son protagonistas y en ésta sí que tiene una correlación muy importante con el anterior, El síndrome E. Son casos distintos pero que derivan de algo acontecido anteriormente. Este caso es mucho más agresivo y más interesante que el anterior. Además de la investigación y el caso en sí mismo, las muertes, los asesinatos… alberga muchísima documentación de temas antropológicos, paleontológicos y biológicos muy interesantes: la teoría de la evolución de Darwin, la influencia de la lateralidad y la violencia, datos científicos médicos… relata una trama compleja, que se desarrolla sencillamente, y que casi toda la información y documentación aportada es verídica lo que conlleva a afirmar que la novela aporta rigurosidad y conocimiento. Una espeluznante novela negra, muy negra por cierto, y que es difícil dejar de leer, por la intensidad de la narración.
Los personajes son los mismos; Lucie Hennebelle y Franck Sharko, dos personajes unidos por el dolor, la pérdida y la locura. Dos personajes que desde El síndrome E están unidos definitivamente aunque ellos se nieguen a verlo. Si ya eran buenos anteriormente, en esta ocasión, el desarrollo de la novela hará que destaquen aún más, y en este caso será Lucie quien nos de muchas sorpresas y quien contenga un giro de tuerca inesperado y nos sorprenda con una evolución lógica y creíble, finalmente. Sharko será más comedido, menos arriesgado por sus múltiples problemas policiales. Todo esto no sería posible sin la maravillosa ambientación que tan bien recrea Thilliez: un ambiente frío y oscuro, de venganza incluso, huele a miedo y dolor, pero a la vez nos rodea un halo de inquietud y turbación genuina logrando que no podamos dejar de leer.
Si de la anterior dije que me faltaba algo, de esta no puedo decir nada. No puedo decir más que es una novela asombrosamente buena, que no olvidas fácilmente; en mi caso personal adoro la mezcla de ciencia con el género más negro y aquí logra una obra excepcional. Un trabajo de documentación increíble el del autor en esta novela, y como de datos dispersos se saca de la manga un thriller apoteósico lleno de maldad humana, de violencia y de dolor. Un thriller adictivo, y que no puedes soltar. Es de esa clase de libros que cierras el libro y te quedas vacía. Sin duda, un libro riguroso y fantástico que me deja con muchas ganas de más Sharko.
RESEÑA:El síndrome E