Gaudium Tinto Reserva 2009, Bodegas Marqués de Cáceres

Por Enogourmet

Gaudium Tinto Reserva 2009, Bodegas Marqués de Cáceres
Uvas Utilizadas: 95% Tempranillo y 5% Graciano
Graduación: 13,5%
Crianza durante 18 meses en barrica de roble francés
Posterior afinamiento en botella durante 24 meses
Uvas procedentes de 6 parcelas de viñedos con superficie total de 11,7 Ha, localizados entre los municipios de Cenicero, San Vicente de la Sonsierra ambos en la Rioja Alta y Lanciego en la Rioja Alavesa.
Producción Limitada de 28.200 botellas para esta añada 2009
Más de cuatro décadas con una única obsesión: la calidad
Enrique Forner fundó en 1970 Marqués de Cáceres, Unión Vitivinícola, S.A., una alianza histórica entre una familia emprendedora dedicada al mundo del vino y los mejores terroirs y viñedos de la Rioja Alta.
Fuerte de su larga experiencia en Francia y más especialmente en Burdeos con la propiedad de dos Chateaux, revolucionó el concepto del vino de Rioja con un modelo empresarial enfocado exclusivamente en la calidad. Una obsesión que hoy sigue siendo el leiv motiv de Cristina Forner, la quinta generación de esta ilustre familia del vino.
Al menos cinco generaciones vinculadas al vino forjan el carácter familiar de Marqués de Cáceres. Enrique Forner, fundador de la bodega en 1970, aprendió con su padre, y éste con el suyo y su abuelo, el negocio del comercio de vinos (‘Vinícola Forner’), interrumpido en España por el exilio en la Guerra Civil. Cristina Forner, su hija y clave en la internacionalización de Marqués de Cáceres, dirige la bodega con el orgullo y la experiencia de una de las grandes familias de España para la que el vino de calidad nunca ha tenido fronteras y con vinos de Marqués de Cáceres presentes en más de 130 países.
La convicción profunda en las ideas asimiladas en Francia por Enrique Forner y trasladadas a Rioja a partir de 1970, siguen siendo los pilares sobre los que Cristina Forner asienta Marqués de Cáceres. Un espíritu, basado en la elaboración de vinos de calidad, en continua evolución con una destacable política de inversión en innovación y tecnología, pero ajena a las modas más o menos pasajeras que distorsionan de vez en cuando la elaboración de vinos y que pierden el objetivo fundamental de este negocio: ofrece al consumidor un vino para disfrutar y para compartir con personas queridas y amigos, sin sobresaltos ni altibajos como la propia historia de Marqués de Cáceres.
El nombre de la Bodega fue cedido por un viejo amigo de la familia Forner D. Vicente Noguera Espinosa de los Monteros, Marqués de Cáceres y Grande de España. El marquesado tiene su origen en el siglo XVIII y fue otorgado por el Rey de España al Capitán de la Real Armada Española Don Juan Ambrosio García de Cáceres y Montemayor en agradecimiento por sus sobresalientes servicios a la Corona en la guerra del Reino de las Dos Sicilias. En el día de hoy, el actual Marqués de Cáceres, D. Juan Noguera continua unido a la Bodega.

Catado el Sábado 9 de Enero 2016
  • En vista, presenta un imponente color cereza de capa media con cardenalicio y discretos reflejos ligeramente iodados, con lágrima gruesa de caída lenta sin llegar a teñir la copa..
  • En nariz, requiere previamente una generosa oxigenación, una vez en copa y bien abierto, ofrece una gran complejidad. Inicialmente destacar una aportación frutal muy potente con recuerdos muy maduros a frutos negros y frutos del bosque, durante los primeros minutos predominan notas mentoladas, con recuerdos de farmacia y sensaciones mentoladas, pero al paso de los minutos un a medida que la copa va tomando aire, se perciben notas especiadas muy marcadas con matices muy dulces los cuales nos afloran a recuerdos de trufa, azúcar caramelizado, embriagadoras notas de torrefactos, matices muy presentes que marcan un recuerdo de cacao y notas de pimentón... seguidamente en un segundo plano aparecen notas minerales, recuerdos vegetales que se extrapolan a recuerdos de tinta china y grafito. La sensación a tierra húmeda desaparece muy rápidamente. En conjunto, se muestra complejo y elegante, sus aromas se van combinando al paso de los minutos, permitiendo disfrutar de numerosas sensaciones, además de multitud de recuerdos a aromas ligeramente evolucionados, cuando la copa se encuentra vacía. 
  • En boca, su entrada es muy carnosa, aterciopelada y transmite una pequeña sensación dulzona. Su ataque inicial transmite frescura gracias a una ligera punta de acidez. Su peso en boca es alto, recorrido largo, postgusto frutal y especiado intenso todo muy acorde a su fase olfativa. Valorar una gran estructura, muy sabroso, además destacar en retronasal notas licorosas para en final ofrecer mucha seriedad y un gran equilibrio. Destacar su capacidad secante alta, con taninos dulces, elegantes y persistentes. En conjunto, un gran vino que creo mucha expectación a todos antes de la cata y que por diversos aspectos, llamó particularmente la atención a todos los componentes durante la cata. Un vino exclusivo, con una  relación calidad precio algo difícil de defender, ya que ese rango no está al alcance de muchos bolsillos, pero este vino sin duda es un referente tanto de esta bodega, como de esta tan reconocida Denominación de Origen y que esta añada 2009, mejora considerablemente las cualidades mostradas en este mismo vino de añada anterior 2008, pero desgraciadamente sin llegar de todos modos a ser el vinazo que a todos nos hubiese gustado descubrir.

PVP Recomendado entre 35 y 45 EurosPuntuación Enogourmet, 91/100 pts