Como se puede ver, y al igual que ocurre en bastantes gaviotas de la ría, tiene el pecho algo manchado. En esta foto puede verse el contraste con otras reidoras en plumaje invernal.
A finales de diciembre localicé otra gaviota reidora en la bahía de Luanco que presentaba bastante avanzado el capirote, aunque menos completo.
Es difícil saber si todos estos días de sol y altas temperaturas que llevamos del invierno habrán influido en esta muda tan temprana.