Vamos con uno de esos grupos que sabe promocionarse muy bien, y es que no hay nada como tener amigos famosos, para poder hacer lo que te salga de los huevos y que la gente lo ponga por las nubes. Este es el caso del productor de Minneapolis Ryan Olson y de dos miembros de Solid Gold, que han llamado a gente de The Rosebuds o al mismisimo Bon Iver, para que canten y toquen en estas canciones.
Bien, pues el resultado esta lejos de ser una maravilla como ya están diciendo por algún lado (he leído unas cuantas barbaridades), y lamentablemente el saxofonista de Andrew Bird tiene bastante protagonismo, y digo esto porque esa extraña mezcla de ritmos a lo Portishead y el saxo sacado de cualquier balada de los ochenta (el mismo productor dice que suena como el I’m Not In Love de 10cc), suena como una remezcla de Kenny G un tanto siniestra, algo que tiene su punto (por lo extraño, no porque suene al saxofonista de rizos), pero poco más.
De hecho, suenan bastante mejor cuando se animan un poco (Faded High), o cuando suenan menos oscuros (Cry)
Evidentemente no es un mal disco, pero no creo que sea una obra maestra como ya están diciendo por algún blog.
Por cierto, la ultima canción esta cortada, así que si me acuerdo de este disco cuando salga una buena copia, lo volveré a subir.