Cuando Gene Clark publicó “White Light” ya llevaba a sus espaldas algunos trabajos al margen de los Byrds, y no cualquier trabajo, había dos de ellos especialmente memorables y que cualquier amante del folk y del country rock y alternativo que se precie debería conocer: “Gene Clark And The Gosdin Brothers” (1967) y “The Fantastic Expedition Of Dillard And Clark” (1968), trabajos que tendrán sus entradas más adelante. En este sentido “White Light”, un disco completamente de cantautor, supuso un cambio de tono con respecto a esas obras. Se trata de un trabajo de folk casi acústico (con el añadido de una estupenda slide guitar), producido con total austeridad y de carácter muy introspectivo, en el que la sentida voz de Clark y sus maravillosas melodías, juegan un papel fundamental, impregnando a todo el conjunto de una melancolía y un sentimiento de nostalgia en el que no puedes evitar sumergirte desde el momento en que empieza a sonar el disco.
Los nueve temas que componen el disco, comenzando por la inicial “The Virgin”, una preciosa canción donde la melodía de Clark, combinada con el juego de la harmónica y la slide, resulta una completa delicia, son, de verdad, una gozada de principio a fin. Es difícil sustraerse al sentimiento a flor de piel que transmiten gemas de melancólica belleza como “Where My Love Lies Asleep”, “Because Of You” o esa pequeña maravilla llamada “With Tomorrow”.
Imposible no disfrutar de estupendos temas de folk rock acústico como “White Light” o “1975”, o reconocer la maestría compositiva de Clark en “One In A Hundred”, tema que había grabado con los Byrds originales el año anterior, en una versión que no llegaría a ver la luz hasta el siguiente trabajo de Clark en 1973, y que en “White Light”, Clark reinterpreta magistralmente en onda singer-songwriter.
Todos los temas del disco llevan la firma de nuestro héroe, excepto “Tears Of rage”, una sentida versión del tema de Bob Dylan y Richard Manuel, al que Gene con su voz doliente y melancólica da una profundidad que emociona.
Sin embargo, aunque pudiera parecer difícil después de lo que acabo de escribir, una joya destaca sobre las demás dentro de este desconocido tesoro, una canción sencillamente sublime de la que el propio Dylan dijo que hubiera estado orgulloso de componer: “For A Spanish Guitar”, un completo deleite de canción que, esta sí, podría estar entre las candidatas a mejor composición de la carrera de Gene Clark.
Al igual que hace poco más de un año, en la entrada dedicada al “Tomorrow The Green Grass” de The Jayhawks, decía que pocas veces recordaba haber sentido tanta emoción (“casi hasta la lágrima”) al escuchar un disco, ese mismo sentimiento experimento con este trabajo, quizá sea el estilo común de ambos, ese folk y ese country rock de portentosas melodías y tono melancólico, que me debe de tocar alguna fibra especial… el caso ambos me llevan a un estado en el que sientes algo así como la tristeza con una sonrisa, no sé cómo explicarlo, pero seguramente debido a ello es que, con 24 años de diferencia entre uno y otro, en mi interior siento estos trabajos como discos hermanos.
Como en otras ocasiones en el caso de Gene Clark, “White Light”, unánimemente aclamado por la crítica, pasó prácticamente desapercibido para un gran público que, deslumbrado por trabajos quizás mucho más radiables, como los de Neil Young o James Taylor, no supo prestar atención a un exquisito ejercicio de sobriedad y austeridad como el de Gene Clark.
*Para hacer esta entrada he tomado algunos datos e ideas del comentario que sobre el disco hace Fco. J. de Paz Blanco en Aloha PopRock.