Georgeos Díaz-Montexano ¿Es la historia sobre la Atlántida una mera invención de Platón? 3 de agosto de 2013
Posted by Georgeos Díaz-Montexano in Antiguas Civilizaciones, Antiguo Egipto, Arqueología, Artículos, Arte Rupestre, Atlantis, Atlantología, Atlantologia Histórica, Atlántida, Buscando la Atlantida, Buscando la Atlántida, Cartografía, Cartografía Antigua, Copta, Copto, Crítica de las Fuentes, Crítica Interpretativa, Crítica Textual (Ecdótica), Critias, Disertaciones, Egiptología, En Busca de la Atlantida, En Busca de la Atlántida, Entrevistas, Entrevistas escritas o periodísticas, Entrevistas radiales, Entrevistas televisivas, Epigrafía, Escriptología, Filología Clásica, Filosofía, Fuentes escritas coptas, Fuentes escritas griegas, Fuentes escritas hindúes, Fuentes escritas latinas, Fuentes primarias y secundarias, Geografía Antigua, Jeroglificos, Nationa Geographic Society, Noticias, Paleoceanografía, Paleogeografía, Paleografía, Platón, Plato, Plato's Atlantis, Sismología, Tartesos, Tartessiologia, Tartessos, Tartessus, Timeo, Tradición manuscrita, Traducción metafrástica (semántica, léxica), Tsunamis.Tags: Atlantida, Atlantida Historica, Atlantis, Cadiz, Columnas de Hercules, Crantor, Critias, Díaz-Montexano, Egiptología, enigmas, Epigrafia, errores de interpretación, falacias, Gadeira, Gades, Gadira, Georgeos, Georgeos Diaz, Georgeos Diaz-Montexano, Gibraltar, Golfo Atlantico, Golfo de Cadiz, Huelva, Isla, Jeroglificos, Madeira, Marruecos, montexano, Paleografia, Pielago del Atlantico, Platón, situacion, Tartessos, Timeo, ubicacion
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¿Es la historia sobre la Atlántida una mera invención de Platón?
Georgeos Díaz-Montexano, Scientific Atlantology International Society (SAIS)
Reconstrucción paleográfica de la Atlántida, por Georgeos Díaz-Montexano
Lamentablemente hay mucha desinformación respecto a la historia de la Atlántida descrita por Platón y otros autores antiguos (incluso ajenos a Platón). Muchas falsedades se han escrito que son usadas por ambos bandos de las dos posturas enfrentadas: defensores de la posibilidad de un sustrato histórico y detractores. Como todo en esta vida, una adecuada información de calidad que sea la más completa o mejor documentada posible, y sobre todo que sea verificable, es lo que marca la verdadera diferencia entre información veraz y desinformación que genera confusión.
Es imposible pontificar en contra de cualquier posibilidad histórica en el relato que Solón trajo de Egipto sin antes haberse estudiado todas las fuentes primarias existentes sobre el asunto. Los escépticos detractores arremeten contra cualquier posibilidad histórica, no admitiendo ni una mínima posibilidad, como por ejemplo, que hubiera sido una importante ciudad de la Edad del Bronce en algún lugar del Atlántico, próxima a las costas de Iberia, Marruecos y Madeira. Pero lo cierto es que el mayor estudio -en cuanto a volumen y calidad de referencias y fuentes primarias- que hasta la fecha ha sido realizado, el único donde se ha trabajado con todas esas fuentes primarias, que son ya más de medio millar (entre códices, papiros, manuscritos, mapas, relieves y pinturas en tumbas y templos, etc.) es el que he venido realizando desde hace ya casi veinte años, y que componen una serie de seis volúmenes sobre Atlantología Histórico-Científica, de los cuales he publicado en fecha reciente un adelanto o resumen en forma de epítome, en dos tomos. Sin leerse estos dos tomos (de unas 762 páginas), y sin haberse hecho aún ni una sola exploración submarina en los puntos que yo logro reconstruir tras tales estudios con las fuentes primarias y no pocas evidencias arqueológicas y sismológicas que he logrado ir reuniendo en todo este tiempo, es imposible pontificar que todo no es más que un mero cuento inventado por Platón. Argumento falaz que ya desmonté hace años, sencillamente mostrando cómo otros autores que consultaron fuentes egipcias de modo independiente, dieron fe de la misma historia escrita entre los egipcios y de cómo esta fue trasmitida a Solón, tal como acredita Plutarco de Queronea, tras sus propias indagaciones entre los sacerdotes egipcios.
Así que si hubo una invención, si alguien se inventó todo lo de la Atlántida, no fue Platón, ni tampoco Solón, sino los sacerdotes egipcios que le trasmitieron la historia al legislador griego, los mismos que Plutarco confirmó en Egipto, y que nombra como Sonjis de Sais y Psenofis de Heliópolis. Pero incluso si asumiéramos esta hipótesis, habría entonces que asumir también, que esos mismos sacerdotes (u otros que desconocemos) falsificarían unos escritos sobre la Atlántida, puesto que Crantor, no mucho después de morir Platón, confirmó la existencia de escritos egipcios con la misma historia de Atlantis que se describe en el diálogo del Critias o el Atlántico, y por supuesto, es absurdo acusar también a Crantor (sin fundamento alguno) de haber sido un vulgar mentiroso como Platón o como Solón. La autoridad, prestigio, ética y valores morales de Crantor, fueron alabados y muy bien considerados por varios autores antiguos de gran autoridad. Nada permite suponer, y menos aún asumir, que Crantor haya mentido y se haya inventado tales testimonios epigráficos sobre la Atlántida entre las fuentes egipcias que él mismo pudo verificar, Si alguien, aún sin fundamento alguno, quisiera creer en tal aberrante especulación subjetiva, en cualquier caso, que sea consciente de que no podría demostrarlo de ningún modo, a menos que fabrique una “Máquina del Tiempo” y viaje hasta el preciso momento en que Crantor visitó Egipto.
La única manera posible de poder pontificar de un modo tan categórico, y con tanta convicción, que la Atlántida fue un mero cuento o fábula inventada por los sacerdotes egipcios, sería si no se hallara absolutamente nada que permita dar soporte histórico a la Atlántida, después de haberse peinado hasta el último rincón bajo el mar en toda el área que yo señalo, por ser la única que se corresponde con mayor precisión a la ubicación que se da de Atlantis en las fuentes antiguas. Pero resulta que, justo la han buscado por casi todos los mares del mundo, menos por el único lugar donde claramente la señalan las fuentes escritas, y que es donde llevo años indicando que se debería buscar.
Si tras realizar esa búsqueda completa no apareciera nada que permita dar soporte de ningún modo a la historia de la Atlántida, sólo entonces se podría confirmar que fue una invención de los sacerdotes egipcios. Sólo entonces se podría decir, pontificar y publicar por todas partes, hacerlo oficial, y hasta “llevarlo a misa”, que la Atlántida nunca existió, al menos en el lugar donde claramente la ubicaban Platón y los demás autores antiguos, y de tales resultados negativos, se podría incluso colegir que fue un cuento inventado por los sacerdotes egipcios, si alguien quisiera ir más lejos aún en las conclusiones.
Sobre todo lo que aquí comento, argumento, y sostengo, pueden hallar detallada información (citas exactas de las fuentes primarias escritas y arqueológicas, y su análisis) en los dos tomos de mi Epítome de la Atlántida Histórico-Científica. Tomo I (www.AtlantidaHistorica.com) y Tomo II (www.Atlantida.be).
Un cordial saludo a tod@s,
Georgeos Díaz-Montexano
http://www.GeorgeosDiazMontexano
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