Geranio

Por Crysolidan
  Sugerida por...Ylagares

1. Planta de la familia de las Geraniáceas, con tallos herbáceos de dos a cuatro decímetros de altura y ramosos, hojas opuestas, pecioladas y de borde ondeado, flores en umbela apretada, y frutos capsulares, alargados, unidos de cinco en cinco, cada uno con su semilla. 2. Flor de esta planta.
Geranio es una palabra de origen griego que nos llega a través de latín geranĭon, a su vez del griego  γεράνιον. En este idioma, tal y como nos indica nuestro custodio Ylagares, γεράνιον (géranos) significa grulla (ave zancuda) nada más y nada menos porque el fruto de esta flor recuerda el pico de esta ave. De hecho, los ingleses denominan al geranio, "pico de grulla", “cranesbill”.
Sea como fuere, el geranio es una planta de la familia de las Geraniáceas que florece entre mayo y septiembre, aunque este periodo puede prolongarse si reciben la humedad y la luz necesaria en los momentos oportunos. Está muy extendida por España, y particularmente en la zona oriental del Mediterráneo. Se cultivan en Europa con fines ormanentales, principalmente para decorar casas y jardines...
 Pablo Neruda (1904-1973) poeta chileno, hace referencia a esta icónica planta en numerosas ocasiones a lo largo de su obra, como en su poema Explico algunas cosas:
"...Mi casa era llamada
la casa de las flores, porque por todas partes
estallaban geranios: era
una bella casa
con perros y chiquillos..."

Curiosamente, Neruda vivía en España cuando estalló la Guerra Civil Española en 1936. Un año más tarde el poeta regresa a Chile y comienza a escribir España en el corazón, poemario donde el autor refleja los horrores de la guerra:
"...Tierras ofendidas. Furor, vuelo de luto 
y muerte y cólera,
hasta que ya las lágrimas y el duelo reunidos,
hasta que las palabras y el desmayo y la ira 
no son sino un montón de huesos en un camino 
y una piedra enterrada por el polvo. 
Es tanto, tanta 
tumba, tanto martirio, tanto 
galope de bestias en la estrella
Nada, ni la victoria 
borrará el agujero terrible de la sangre:
 nada, ni el mar, ni el paso 
de arena y tiempo, ni el geranio ardiendo 
sobre la sepultura..."
¡Hasta la próxima flor! ;-)