Pero puede que no sea exagerado decir que sí que es uno de los solos de saxo más conocidos de la historia del Rock.
Creo que la memoria no me falla en esto de recordar imágenes relacionadas de la historia. Por eso puedo asegura que la primera vez que escuché este sólo de saxo fue en un anuncio de una marca conocida de tabaco, cuando se podían emitir por la tv.
Esa melodía se me quedó en el cerebro como algo único y maravilloso, y tardé años en saber de quien era para poder hacerme con ella.
La conseguí en un Cd que venían canciones de corte lento.
Salvo algún tema que ya conocía, no me importaba si el resto no me gustaba. Lo único que me interesaba era esta canción y otra de Kata Bush.
Este tema no lo puedo catalogar más que como fantástico. Un tema de Soft Rock que no tiene desperdicio.
Fue un éxito mundial en el 78. Pero más allá del éxito, es el típico tema que pasará a la historia y que, en mayor o menor medida, siempre será recordado.
Gerry, ni antes, ni después consiguió tanta repercusión con otro tema, aunque sí algún que otro hit menor.
No obstante, su sonido suave, un AOR apto para todos los públicos, vale la pena una escucha.
Y este tema muchas escuchas más.
Un clásico total.