Belén Esteban: Según ella, España la pedía que concursara en un reality… Y ella, que es muy de satisfacer a su pueblo, lo ha hecho sin rechistar (suponemos que los 60.000 euros que se rumorea que cobra por semana no han tenido nada que ver…). De momento, parece que hemos sobrevivido a verla recién levantada y bostezando sin tener que pedir asistencia psiquiátrica, así que los demás será coser y cantar. Belén quiere dejar dos cosas claras: Que si hay alguien en el país que desconoce el nombre de su hija se lo aprenda de una puñetera vez; y que ella es una mujer tolerante y moderna, de esas que son capaces de cuestionar a alguien como madre porque tenga una visión diferente a la suya en cuanto al sexo… Muy del Siglo XXI todo… Lo peor es que el peloteo de sus compañeros es evidente desde el minuto cero (y dudo que sea por la habilidad de la Esteban para cocinar ese pollo que tan poco le gustaba a su pequeña) y la audiencia la llevará hasta el final… Si la eligió como la mejor bailarina en dura pugna con la mismísima Edurne, uno ya se espera cualquier cosa…
Kiko Rivera: Fichaje estrella y tardío del concurso que ha llevado al programa a una audiencia estratosférica. El retoño de MiPanto llega a Guadalix con una madre en la cárcel y una hermana con aspiraciones de tronista low-cost. Con este panorama es lógico que el chaval haya optado por saquear la despensa de la casa (poniéndose como el kiko ja ja ja) y olvidarse del mundo. De momento, Kiko se ha mostrado conciliador hasta con sus dos enemigas declaradas –Aguasantas y Laura Cuevas- (aunque sin dejar de tirar pullas tan hirientes como lógicas), ha hecho gala de su sentido del humor y no se le está viendo el plumero. Vamos, que me cae tan bien que hasta le veo mono… Y no, no me he fumado nada…
Olvido Hormigos: La ex concejala metida a estrella televisiva decidió que la mejor manera de curarse de su adicción al Tinder era meterse en Gran Hermano. Lo que no se esperaba la de Los Yébenes era que ahí la esperaba la Esteban para hacerle la vida imposible y ponerla en el disparadero, día sí y día también, por la forma en la que ha decidido vivir su vida. Nadie es quien para juzgar a nadie, pero quizás la Esteban es la que menos puede hablar del mejor modo de ser una buena madre. Pero ya sabemos que lo políticamente incorrecto no está bien visto en este país y de momento, Olvido intenta olvidarse de lo que ha dejado fuera (que lo echará tanto o más de menos que la Princesa del Pueblo) y prefiere morir de pie que vivir de rodillas. Es decir, ya no hay quien la calle y no se amedrenta ante una Belén cuya prioridad es poner a la casa en su contra y que sufra su estancia en el concurso. ¡Olé ella!Los Chunguitos: Como su propio nombre indica, son Chungos de narices. Después de sus comentarios racistas contra Coman (se habrán pensado éstos que son de raza aria…), de planificar su salida del concurso estafando a la organización, de asegurar que lo más gracioso que han hecho en su vida es abandonar a un perro en una gasolinera y que “preferirían un hijo deforme a un hijo maricón”; los hermanos Salazar han sido expulsados del concurso por la mismísima Mediaset. De vergüenza… Como dijo Jorge Javier, “Mejor cerrar la boca y que piensen que eres tonto, que abrirla y demostrarlo”. Y es que, la espontaneidad no es una virtud cuando está cargada de ideas arcaicas, retrógradas y vomitivas.Ylenia: La ambición rubia de Benidorm abandona su reclusión mediática para volver a coronarse como la choni más auténtica de España. Ylenia es lo más: Espontánea, arrolladora, sin pelos en la lengua.... Una mujer frágil (insegura y manipulable) en un envoltorio de matahari de extrarradio maravilloso. Ha llegado con la intención de quitarse de encima la mala reputación que se ganó a golpe de pelvis y cubata en Gandía Shore. De momento, se lleva un minipunto negativo por dejarse llevar por la ira de la Esteban y hacer suyo aquello de “hablo de puta, la tacones” pasándose las horas metiendo mierda contra Olvido por su forma de vida…Víctor Sandoval: El protagonista de la historia de desamor gay más famosa de la tele tiene una complicada misión: Conseguir que su egocentrismo, exceso de verborrea e histrionismo intenso, traspasen la pantalla y consigan encandilarnos. Víctor en estado puro es más insoportable que una botella de coca-cola en el ojete (y si no, que se lo pregunten a Nacho Polo...), pero es natural y espontáneo como pocos. Aunque su amistad con Belén (que ni ella misma entiende...) está marcando su entrada en la casa, Víctor intenta no posicionarse demasiado -con el peligro de parece falso que eso conlleva- y da su apoyo a la víctima por derecho propio de esta edición: Olvido. Aguasantas: El azote de Raquel Bollo pierde mucha fuerza cuando no tiene a nadie contra el que enfrentarse, y parece que ni Belén ni Kiko están por la labor de hacerlo. Y así, no nos gusta. La nuera más famosa de la tele sólo tiene sentido si no hace honor a su nombre y se vuelve mala malísima, pero por el momento sólo tiene aspiraciones de mueble de Ikea. Sandro Rey: El vidente con menos visión de la tele salta desde las piscinas telecinqueras hasta las casa de Guadalix para convertirse en el mediador oficial del concurso, siempre que Coman no ponga remedio. Un aburrimiento… Más allá de sus excentricidades, Sandro pinta menos en el concurso que Naty Abascal en una fiesta de refrescos.Laura Cuevas: Esta mujer parece haberle robado el rostro a Estela Reynolds para meterse dentro de la casa más famosa de la tele. Parecía que la entrada de Kiko iba a propiciar un toma y daca de insultos, pullas y discusiones; pero de momento nada de nada. Salvo un enorme “tráeme un vaso de agua como en los viejos tiempos” de Kiko hacia la traidora de Cantora, parece que la relación no termina de explotar y no veremos la sangre corriendo por Guadalix. Una lástima…Coman: Una vez que el Adán negro entró con el manubrio colgando y cero complejos para mostrarlo, la gracia de Coman en esta casa es la misma que la de limpiarse el culo con papel de lija. Afortunadamente, se está convirtiendo en el pañuelo de lágrimas de una Olvido denostada por el resto de la casa… Sólo esperamos que a la mujer de los dedos de oro le apetezca un día de estos probar un plátano más maduro de lo normal y encuentre en Coman a su frutero particular.Israel Lancho: Torero con fama de ligón y cara de "amigo simpático” que, salvo beberse hasta el agua de los floreros, soltar alguna mamarrachada fuera de lugar y empeñarse en que la gente entienda su arte como algo más allá de un asesinato, no aporta gran cosa. Me esperaba mucho más de un ligue de mi amada Obregón… Mi primer candidato para la expulsión tras estar nominado con la gran Olvido y Laura Cuevas. Ares Teixidó: Comenzó siendo mi favorita por ser curranta de la tele, más allá de un personaje televisivo sin más. Pero se está convirtiendo por méritos propios (y mira que me fastiia decirlo) en la mala oficial de la edición. Metemierda, criticona, antigua y pelota. La reportera lo tiene todo para salir por patas de la casa en cuanto la nominen. ¡Ay Ares! ¡Con lo bien que estabas tú mostrando tu profesionalidad y no tu personalidad!Fede: La ración de italiano buenorro con la que toda edición de Gran Hermano que se precie debe contar. Sin más. Si no fuera porque Ylenia está cayendo en su juego de romance fingido, éste hombre sería más soso que un striptease de Iniesta…Veremos cómo evoluciona la convivencia del mejor casting VIP parido por un reality y hasta donde se eleva la audiencia de un formato que, año tras año, demuestra estar más vivo que nunca. Por mi parte……con que no gane Belén, me doy por satisfecho.Por Sergio Mata