Pasarnos dos grados en la temperatura global promedio no es tan sencillo como ¨le subo al ventilador¨
Colombia, México, Perú, República Dominicana, Trinidad y Tobago, Nicaragua, países que ¨suenan¨ en proyectos de cambio climático
Puede que Venezuela sea menos vulnerable, pero está menos preparada.
La COPP en Durban fue muestra del reconocimiento de los países petroleros de su responsabilidad en emprender acciones
El 7 de diciembre de 2012, en el marco de la cumbre mundial de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, realizada en Qatar, Venezuela anunció su intención de ser huésped de la misma en el 2014. El hecho de que sea el uso de hidrocarburos (petróleo – carbón), el causante de la mayor cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) es más que suficiente para que países productores tengan interés en la solución al problema. Es evidente, comprensible y muy optimista la renovada preocupación e interés que está ganando el tema del calentamiento global sobre este grupo de países, así como los esfuerzos que intentan frenarlo.
Hoy, el reto es consolidar, dinámica y organizadamente, mecanismos de adaptación y mitigación para la disminución de los GEI´s, pues no pareciera que va a ser lo requerido para evitar los problemas que tanto se han anunciado. Ya Naciones Unidas reconoció en la cumbre de Rio+20 la preocupación por no lograr emisiones anuales globales que controlen el aumento de la temperatura media global por debajo de los “críticos” 2° C.
Son muchas las oportunidades que tenemos localmente para contribuir a frenar el problema y demostrar un compromiso voluntario y solidario de reducir emisiones. Nuevos modelos y mecanismos se han desarrollado por más de diez años, y hoy, estrategias sectoriales y políticas nacionales son factibles. El desarrollo con bajas emisiones está siendo ya evaluado por países vecinos, pues es claro que prepararse no es una elección, es una responsabilidad donde la demora solo empeora la situación.
Gianluca Merlo
¨Mientras todo el mundo está haciendo su tarea, nosotros estamos viendo televisión y nos van a raspar en el examen¨. Dice Gianluca Merlo, ingeniero mecánico de la Universidad Simón Bolívar y gerente de proyectos de EcoRessources Carbono, refiriéndose a las acciones que Venezuela tiene en agenda pendiente con relación al cambio climático. ¨Me mueve como venezolano todo esto¨, dice con pasión y preocupación.
El cambio climático todavía para algunos es un mito, pero el consenso mundial apunta a un peligroso aumento de la temperatura del planeta en dos grados dentro de unas décadas. Ya se hacen sentir las sequías, inundaciones y otros fenómenos que requieren estrategias o planes de adaptación para enfrentar los efectos negativos sobre la economía, los ecosistemas y las poblaciones del mundo. Más que adecuarse a las alteraciones que vendrán (adaptación), deberían aunarse esfuerzos para reducir el impacto de los Gases de Efecto Invernadero, GEI (mitigación), lamentablemente los problemas económicos del globo y los obstáculos políticos, han hecho que todos los recursos se dirijan a lo primero.
¿Qué es EcoRessources Carbono? Es una empresa que se dedica al análisis ambiental, enfocado a la parte económica. Colabora en medidas de adaptación al cambio climático acompañando a organismos públicos, empresas privadas y comunidades en la elaboración de sus estrategias y planes de acción para la adaptación. ¨Es cada vez más común que se soliciten diagnósticos de impactos y vulnerabilidades para analizar los riesgos socio-económicos asociados con los cambios del clima e identificar las acciones de adaptación más eficientes¨. Expone Merlo, por ello el énfasis está generalmente en enfoques participativos y de capacitación técnica e institucional ante los cambios de mayor impacto previstos en los estudios. Ecoressources se funda en 2004 en Canadá. A partir del 2006 tiene representaciones en algunas ciudades latinoamericanas bajo el nombre de EcoRessources Carbono. Puede abarcar algo tan intangible como cuánto vale el oso polar, un proyecto que se hizo en el país de origen. Tiene expertos en diferentes áreas que se dedican a llevar la variable ambiental a las finanzas. Para entender aun más, dice que en el país por ejemplo, podría pensarse en el análisis de lo que podría afectar algún desarrollo a El Avila, evaluar cuánto vale la montaña para los caraqueños. ¨Se sopesa lo económico del proyecto versus el valor que representa tener para la comunidad ese recurso natural. Eso es perfectamente cuantificable¨.
Otra área de desempeño es la de proyectos de bonos de carbono, pero este mercado cayó tras la crisis en Europa y de la culminación del primer periodo del Protocolo de Kyoto. La cotización pasó de 14 a 0,50 euros, por lo cual hoy en día hace que cueste más registrar un proyecto que los beneficios que daría.
¿Qué países están llevando a cabo planes contra el cambio climático? Los Emiratos Arabes están haciendo planes de reducción. El hecho que la COPP haya sido en Durban es porque los países petroleros reconocen que son los primeros que deben emprender acciones contra esta amenaza. Actualmente casi todos los países de Latinoamérica preparan planes y/o estrategias de adaptación, Argentina, Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, entre otros, los desarrollan activamente como parte integral la agenda nacional de desarrollo sostenible, enlazados a planes sectoriales.
¿Cuál es el análisis para Venezuela? En los últimos tres años prácticamente no ha habido verano. No hace falta tener estudios científicos de alto nivel, que los hay, simplemente al entrar en Google ya está la visión de cómo se vería la tierra con cuatro grados más de temperatura. El mayor impacto ocurriría en el sur en cuanto a fenómenos en nuestro planeta. Las proyecciones pueden ser más o menos acertadas pero lo cierto es que habrá un cambio. Hay países que están tomando datos de la variabilidad climática y están ajustando sus modelos. Se calcula que el nivel del mar se elevará. Tenemos sitios en el sur del Lago de Maracaibo que están por debajo de ese nivel en tres y cuatro metros. En Higuerote por ejemplo hay que preguntarse qué pasaría con los ríos, con los drenajes de aguas negras, etc. Y si a eso agregamos la onda de algún temporal o tormenta el panorama se complica. Tenemos que saber cuáles son las zonas de riesgo, porque en ellas no se pueden poner servicios básicos como escuelas y hospitales. Debemos vaciar toda esta información de forma transversal en la planificación del país y armar un documento serio de cómo va a ser el impacto.
¿Qué están haciendo otros países latinoamericanos? En EcoRessources hemos optado por la modalidad más novedosa dentro de los Mecanismos de Desarrollo Limpio MDL (según Naciones Unidas) que es hacer programas POA (Program of Activities), programas sombrilla que se desarrollan en uno o varios países por los períodos largos. Hicimos un POA de energía eólica para Nicaragua, uno de biogás para República Dominicana y Nicaragua y tenemos uno de pequeñas centrales hidroeléctricas en Perú. Estos proyectos son de más de diez años. Son estrategias privadas en las cuales el Gobierno de esos países puede participar.
En algunos países se trabaja mediante plataformas abiertas, esto es, con quien tenga proyectos, sea el Gobierno, el sector privado o ambos. Para que se den estas plataformas se necesita que haya una estrategia clara de energías renovables en ese sector específico durante los próximos 28 años. En Perú por ejemplo se hace anualmente una subasta de energías renovables dando un cupo máximo y gana quien ofrece la tarifa más baja por Kw hora. Es una vía eficiente, el precio es fijo y el Estado se compromete a comprarle toda la energía a ese valor. Así los programas que ganan se desarrollan.
El caso Nicaragua, un buen ejemplo. Merlo hace énfasis en esta nación porque a su criterio se parece a Venezuela en muchos aspectos. Ese país tiene como meta tener al 2019 casi el 90 por ciento por energía renovable. ¨Cuando tienes ese tipo de metas como país los inversionistas privados confían y registran proyectos. Hay una posición clara de que hay que generar energías renovables y eso es lo que hace que se desarrollen estas estrategias. Son países que aunque tienen un lenguaje político que puede coincidir con el venezolano y si bien tienen sus reservas a hacer proyectos, están muy conscientes de que el cambio climático es un tema a atender y la mejor forma posible para un país que no tiene tantos recursos es recibir inversión. En Nicaragua ahora está en estudio un proyecto en un valle orientado a evaluar cuáles serán las variaciones en lluvia a los cuales esa zona tiene que adaptarse. En ese plan están participando alcaldías y todo lo que tiene que ver con agroproducción, hidrología, salud e infraestructura. La idea es tener herramientas necesarias para planificar a largo plazo. Esto muestra que Nicaragua aun siendo un país pequeño ya se está preparando.
¿Existen ministerios u oficinas de planificación de cambio climático en el continente? En Latinoamérica todos los países tienen. República Dominicana tiene la oficina de cambio climático más grande de la región. Cuba también tiene una. En Ecuador se hacen proyectos de carbono. Venezuela no tiene esta dependencia, creo que sólo un comité ad hoc de varios funcionarios que se reúnen para hablar sobre el tema. Está bien que no se quiera hacer proyectos de bonos de carbono y meterse en este mercado, lo que no es correcto es no tener un plan nacional de adaptación al cambio climático.
Bonos de carbono voluntarios. Son otro mecanismo para las empresas que quieren neutralizar sus actividades. Un ejemplo interesante, según Merlo, fue la inversión de Disney de 35 millones de dólares en bonos de carbono en la selva peruana. ¨Esos 35 millones de dólares no serán usados en otra cosa que no sea asegurarse que para los próximos diez años esa selva de donde se van a capturar emisiones de CO2 sea preservada. Y eso va a financiar a los ingenieros forestales, el monitoreo satelital que se necesitará¨. Otro ejemplo interesante es Google, que neutraliza sus emisiones. Estas acciones indican que hay una creciente disponibilidad de recursos del lado voluntario y para las organizaciones, es mejor contribuir financieramente a que estos proyectos sean sostenibles en el tiempo más que alguna otra opción. El monitoreo diario garantiza la efectividad de los aportes. ¨Es un proceso de auditoría severo¨.
¿Qué se puede hacer en Venezuela? ¨Implementar políticas para la reducción sistemática de emisiones en sectores clave como el energético e hidrocarburos, donde sin duda lograría aportar significativas reducciones sumando un importante aporte a este esfuerzo global. El incremento previsto de temperaturas está entre los 2 y 5° C (promedio) al 2100, uno de los más altos de la región. Esto repercutirá sobre la demanda energética, disponibilidad de agua y salud pública. La elevación prevista del nivel del mar en un metro podría causar pérdidas importantes en las zonas costeras donde se concentra la mayor parte de la población, con daños importantes en infraestructura y la pérdida de ecosistemas frágiles como humedales costeros, manglares y arrecifes coralinos, afectando a la vez la pesca, al alterar estas zonas de reproducción. La disminución de las precipitaciones prevista entre 3% y 20% así como el incremento de períodos de sequía inusuales, intensificarían los problemas de disponibilidad de agua y energía, así como conflictos por su uso en zonas densamente pobladas. Los ya conocidos periodos de lluvias intensas, se intensificarían, incrementando daños por inundaciones y deslaves¨. A criterio de este experto, el discurso político ha estado muy sesgado lo que hizo que en 2005 la idea de mercantilización del tema del cambio climático lo convirtiera en tabú y paralizó el tema en la discusión.
Abrir los ojos y escuchar. Para este profesional un área crítica en el país es la energética. Si se analiza que en el país la generación de electricidad depende en un alto porcentaje de una misma cuenca y que con el cambio climático disminuirá la pluviosidad, se impone urgentemente un cambio de estrategia. Las ideas son muchas, entre ellas Merlo aporta las mini centrales hidroeléctricas en las caídas de agua de los ríos andinos, emulando un proyecto que ha sido exitoso en Perú y brinda casi un 15% de la energía de ese país. Como venezolano preocupado sólo concluye que es prioritario abrir los ojos y escuchar, ver ejemplos. ¨Tenemos que entender cómo vamos a ser afectados y cómo nos podemos preparar. No tiene nada que ver con el mercantilismo. Se trata de cuidar a la población¨.
Por Heidy Ramírez Schmegner
@ideagenial
Miembro de la red Periodismo ante el Cambio Climático