Estos son los ingredientes para la masa.
Para prepararla primero derretimos la mantequilla y la mezclamos con la leche y los huevos batidos. En otro bol mezclamos la harina, la levadura y la sal e incorporamos las dos mezclas batiendo manualmente. Añadimos la sobrasada, yo la puse 1 minuto en el microondas para que estuviera un poco desecha y poder trabajarla mejor con la masa.
Engrasamos los moldes un poco y vertemos la masa llenando justo los picos de los moldes.
Precalentamos el horno a 200 grados y horneamos 8-9 minutos. Los sacamos, dejamos dos minutos que se enfríen un poco y desmoldamos los gofres encima de la bandeja del horno y volvemos a meter con el lado de los dibujos hacia arriba otros 4-5 minutos más hasta que se doren.
Mientras se hornean los gofres nos da tiempo a preparar la crema de roquefort. La podemos hacer a mano o con la batidora, en este caso la hice a mano con un tenedor, porque quería que se notaran los trozos de queso. Mezclamos una cuña de roquefort de 100gr con dos cucharadas de crema de queso y cuatro cucharadas de nata líquida. Si queréis que no sepa tanto a roquefort usamos más queso crema, y si queremos más ligera usamos más nata líquida, vosotros vais probando (sí, con el dedo) cómo os va gustando y ponéis o quitáis ingredientes.
Y con los gofres templados untamos de roquefort y añadimos el salmón ahumado. Una delicia, de verdad y muy resultón. El contraste de sabores es genial. Ya me contareis.
Mi recomendación musical de hoy es Juan Zelada, si no lo conocéis os lo recomiendo, esta canción es THE BLUES REMAIN. Ver video