Durante el segundo trimestre de este año hemos empezado una actividad nueva, se trata de Golf Adaptado. Nos enteramos de que quedaba una vacante y la solicitamos. Se trata de un club de Golf muy cerquita de Valencia en el que llevan un programa de Golf Adaptado al que acceden niños con diferentes diversidades. La actividad en si está muy bien, el ambiente es muy relajado, enseñan a los niños las nociones básicas del golf y se lo pasan estupendamente haciendo diferentes golpes.
Una ventaja de este club es que está justo al lado del aeropuerto y constantemente aterrizan y despegan aviones, lo tomo como ventaja porque a Miguel le encantan, le sirve de motivación para mantenerse atento, de vía de escape ya que mirarlos le relaja mucho y también para acudir al golf con más ganas.
Esta actividad como cualquier otra, le aporta diferentes aprendizajes, además de aprender la tarea concreta de jugar al golf, le sirve a nivel social porque comparte la tarea con otros niños y con varios monitores, a veces sin darnos cuenta, limitamos la vida social de nuestros chicos y esta es una oportunidad para que no sea así. En el club, Miguel se relaciona principalmente con su monitor, pero en ocasiones tiene que relacionarse con otras personas, si hacen algo por turnos tiene que saber detrás de quien va, si otro monitor le dice algo, él debe responder... Otra ventaja que veo a esta actividades es que debe trabajar un montón de cosas, la atención es muy importante y no es muy complicado trabajarla por el ambiente tranquilo que hay, tiene que mejorar su coordinación óculo-manual, debe mirar a donde quiere tirar, debe calcular la fuerza con la que hace el golpe, debe conocer las posturas adecuadas, dependiendo de la distancia se colocará de una manera o de otra... En fin qué es una actividad diferente que me ha sorprendido gratamente, porque no pensé que Miguel pudiera participar y además pasarlo tan bien. Siempre procuro no ponerle límites a Miguel, pero sigo comprobando que lo hago inconscientemente, cuando me hablaron de esta actividad pensé "¡¡uy, no es para Miguel!!" sin embargo, ahí está, dándome lecciones día a día.