Gone Girl (Perdida)

Publicado el 24 octubre 2014 por Ginebra Bricollé Nadal @Gine_1414

Fincher llevaba demasiado tiempo alejado de la gran pantalla. Tras su versión de Millenium se había quedado en la pequeña pantalla dirigiendo un par de episodios de House of Cards y siendo su productor ejecutivo. Viendo su nueva película se nota que tenía ganas de volver y hacerlo por la puerta grande, y no hay duda de que lo ha logrado.

Gone Girl (Perdida), basada en su novela homónima de Gillian Flynn (autor también del guión) nos cuenta como vive Nick la desaparición de su mujer Amy. Este suceso trastoca la aburrida monotonía de toda una comunidad que se divide entre los defensores del pobre marido y los que ven a Nick como el principal sospechoso.

La película es una acurada radiografía de nuestra sociedad, dónde las apariencias y el personaje social se funde con la personalidad real de los protagonistas. Dónde los medios despotrican sin validar fuentes, basando sus afirmaciones en deducciones personales. A lo largo del film vemos la lucha del protagonista con el entorno. No hay posicionamientos en Gone Girl (Perdida), pero sí hay un mensaje pesimista entorno a una sociedad obsesionada por las apariencias y por la necesidad de tener un rol social reconocido para vivir una vida llena. Nadie, ni siquiera nuestros protagonistas se salvan de la feroz crítica. Nuestra convivencia colectiva está podrida, y Flynn y Fincher son los mejores narradores para mostrárnoslo.

Fincher y Flynn construyen una narración juguetona lleno de giros que sorprenden y de forma muy cínica divierten, pero que no son efectistas. Fincher ha vuelto a la mala leche de El Club de la Lucha y Seven, bajo el empaque elegante y serio de Zodiac. Para ello se rodea de su equipo habitual: música de Trent Reznor y Atticus Ross, fotografía de Jeff Cronenweth y montaje de Kirk Baxter.

Ben Affleck es el encargado de interpretar a Nick Dunne, culpable, víctima y verdugo de su particular pesadilla, cumple con el papel y aguanta el peso del film. Pero es Rosamund Pike, Amy Dunne, quien roba cada escena en la que aparece. La actriz londinense demuestra que cuando le dan un papel de peso sobresale, y hace una espléndida interpretación. Como secundario destacan Neil Patrick Harris, Carrie Coon, Kim Dickens y Tyler Perry.

Gone Girl (Perdida) funciona como película detectivesca, como drama y como reflexión social. Entretiene e incita a pensar. Fincher ha vuelto en plena forma, con una lúcida crítica a la sociedad del consumo y las apariencias gracias al texto de Flynn.

NOTA