La idea, tal y como sucedió con las diferentes cámaras GoPro, sería ofrecer a los usuarios unos dispositivos que pudieran ser accesibles a todo el mundo y a todos los bolsillos. Ahora mismo los drones tienen unos precios en la mayoría de los casos, y si lo que se busca es la potencia y calidad, muy elevados y fuera del alcance de la mayoría de personas.
Según los últimos rumores que hemos podido conocer los precios oscilarían entre los 500 y los 1.000 dólares o lo que es lo mismo entre los 400 y los 800 euros, dependiendo del modelo que se quisiera adquirir.
Por supuesto, creo que no hace falta ni mencionarlo, que llevarían soportes especiales para poder acoplar de una forma sencilla las cámaras GoPro y para poder grabar desde los cielos casi todo lo que nos viniera en gana.
De momento esta entrada en el mercado de los drones de GoPro no está confirmada de forma oficial, pero no hay duda de que sería un gran movimiento ya que cada vez existe una mayor demanda de este tipo de dispositivos.
Además comprar un drone de la compañía de cámaras de acción más importante y popular, sería un acierto seguro.