Pues bien todas hemos escuchado hablar de las mascarillas, pero ¿Todo el mundo necesita utilizar una mascarilla facial? ¿Cuál se debe aplicar? ¿Cuándo empiezo a notar los resultados? Lo primero que debes de tener en cuenta es tu tipo de piel, el resultado que se desea obtener y que debes ser constante para obtener un cambio notorio. A continuación te mencionaremos algunas recetas que puedes usar según la necesidad de tu piel.
Mascarilla de kiwi
El kiwi es ideal ya que se trata de una fruta con altas propiedades astringentes que controla el exceso de grasa y elimina la mayoría de impurezas del rostro. Simplemente debes pelar el kiwi, trocearlo y colocarlo en el vaso de la batidora. Luego, añade dos cucharadas de yogur natural y bate ambos ingredientes hasta conseguir una pasta homogénea y compacta. Aplica la mezcla sobre la piel limpia con movimientos suaves y déjala actuar unos 15 minutos. Por último, retírala con agua y aplica una crema hidratante específica para piel grasa para obtener mejores resultados.
Mascarilla de avena Es increíble lo suave que queda la piel después de utilizar esta mascarilla. Solo necesitas licuar o machacar muy bien media taza de avena y agregarle media cucharadita de miel de abejas, dos cucharadas de leche, dos gotas de aceite de geranio y dos gotas de aceite de manzanilla. Mezcla bien y aplica esta pasta con tus dedos mediante masajes circulares. Déjala por 15 minutos y retírala con agua tibia. Tu piel quedará tan suave como la de un bebé.
Mascarillas de fresas
Con unas fresas y un yogur acabarás con la grasa de tu piel. Recuerda que las fresas tienen propiedades beneficiosas, como el ácido que ayuda a la exfoliación de tu piel. Para obtener esta mascarilla, haz un batido de fresas e incorpora una cucharada sopera de yogur natural. También puedes añadir una cucharadita de fécula de maíz en polvo y una cucharadita de miel. Una vez lo tengas todo mezclado, extiéndelo sobre tu rostro y déjalo reposar durante 10 minutos aproximadamente. Después retírala con agua templada y aplícate tu crema hidratante habitual. En unos días tu piel se verá sin brillos y menos grasienta.
Mascarilla de yogurt Las arrugas hablan de experiencia y madurez pero a nadie le gustan, con esta mascarilla las reducirás. Mezcla un vaso de yogurt natural con una cucharadita de semillas de hinojo y otra de hojas de la misma planta trituradas. La crema debe ser homogénea cuando la apliques en tu rostro. Déjala durante 20 minutos y retírala con agua tibia. Repítelo día a día y tu piel lo agradecerá.
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