En los estudios que SEO viene realizando de forma anual se constata un ligero declive del gorrión en España, aproximadamente de un 10%. En otros países de Europa su situación es mucho peor, habiendo desaparecido prácticamente de ciudades como Londres. Las causas de este declive son diversas, por ejemplo la competencia con especies en continuo aumento como las palomas domésticas, las construcciones modernas que no favorecen precisamente su nidificación, el uso creciente de insecticidas y herbicidas, o la tala de arboles viejos.
En las zonas donde yo tengo referencias su situación no parece ser mala. Ahora en invierno los gorriones se reúnen en grupos tanto en zonas urbanas como rurales. Buscan alimento en las rastrojeras, los parques y los baldíos sin importarles demasiado la compañía humana. Las fotos que subo en la entrada pertenecen a un grupo de unos 20 pájaros que está pasando el invierno por la zona de San Juan de Nieva.
Para mejorar su situación es imprescindible actuar en los núcleos urbanos, logrando que sean más habitables para el gorrión, lo cual se puede hacer incrementando la superficie de parques y jardines, respetando sus puntos de nidificación o aumentando su disponibilidad de alimento. Recuerdo cuando era pequeño lo tradicional que era ver montoncillos de migas de pan para los gorriones en pueblos como Luanco, estas cosas por desgracia cada vez se ven menos. Parece que no nos gusta tanto disfrutar de su compañía.