MAD GREY DWAN (21 DE MARZO DE 2016) -AVISO SPOILERS-
Siempre he pensado que Gotham funcionaba mucho mejor como precuela de las dos películas sobe Batman de Tim Burton, que con respecto a la trilogía de Christopher Nolan. La presencia de Paul Reubens en este episodio confirma esta intuición. Reubens fue famoso en los años 80 como Pee-wee Herman, anfitrión de un programa infantil que al convertirse en largometraje cinematográfico sirvió de ópera prima para el mencionado Burton. En Batman vuelve (1992), el director recuperaba a Reubens en un papel minúsculo como el padre del Pingüino (Danny DeVito). 24 años después, volvemos a ver a Reubens interpretando al padre del villano, esta vez encarnado por Robin Lord Taylor. El guiño me ha resultado emocionante, pero no nos engañemos, es un giro más en la trayectoria de un personaje desperdiciado. El Pingüino fue lo más interesante de la serie en la primera temporada y su ascenso en el escalafón de la mafia de Gotham era realmente atractivo. Pero la trama se disolvió en una serie sin dirección. Oswald Cobblepot consiguió ser el peor criminal de Gotham pero ello no produjo ni una sola historia interesante. Sin saber qué hacer con el personaje, a los guionistas no se les ha ocurrido otra cosa que hacerle caer. Le han quitado su organización criminal, su libertad, su cordura y ahora sus ganas de matar. Devolverle a un entorno familiar parece un nuevo comienzo. A ver si esta vez aciertan.