Me encantan este tipo de guisos, de los que te haría falta una barra de pan para ti sola. Cuando Leny de Cocina de muerte lenta me propuso cocinarlo para el recet-a2 de mayo me pareció una idea excelente. No hacía mucho había comprado pimentón de matanzas y me ha hecho un buen uso. Ella ha hecho un goulash vegano, una receta que no os podéis perder nadie y con más razón los que no coméis carne. El goulash es un estofado de carne típico de Hungría cocinado con vino tinto y pimentón húngaro(paprika). Hecho a fuego lento en cazuela sale verdaderamente delicioso.
ELABORACIÓN
Salpimentamos la carne y la enharinamos, la sellamos en la cazuela en abundante aceite de oliva. Retiramos y reservamos. En el mismo aceite, rehogamos la cebolla cortada pequeña con los ajos. Cuando esté tierno añadiremos las zanahorias cortadas en rodajas finas y dejaremos que se cocinen unos 5 minutos. Yo use un tarro de tomate frito casero que nos regaló Aneto en la feria de Alimentaria, todavía no ha salido a la venta pero intuyo que va a ser la bomba cuando lo haga. Es realmente bueno, nada que ver con ningún tomate comprado. Vosotros en la receta usad una salsa de tomate hecha en casa. Añadimos las cucharadas de tomate y integramos todo, dejamos un par de minutos. Incorporamos la carne dando un par de vueltas con una cuchara de madera para que se impregne de la salsa. Añadimos la cucharada colada de pimentón y volvemos a remover. Añadimos un vaso de vino y dejamos 5 minutos a fuego vivo mientras removemos. Añadimos el resto de vino y agua, retocamos de sal y dejaremos cocinar a fuego mínimo durante 30-45 minutos o hasta que vosotros veáis que la salsa ya tiene la consistencia deseada. Yo lo hago de un día para otro, de esta manera el guiso tendrá los sabores mucho más reposados.
A DISFRUTAR!