Dinámica la gala de este año. Buenefuente lo ha hecho bien, con humor ácido, sin aderezos excesivos y desde luego que el producto final ha resultado entretenido.
Celda 211 se consagra como la mejor película española de 2009.
Goya a mejor película, mejor director, mejor actor prota(Luis Tosar), mejor actor revelación(Alberto Ammann), mejor guión adaptado, mejor actriz de reparto(Marta Etura), y mejor montaje.
Lo de Luis Tosar lo teníamos claro, igual que Alberto Ammann que nos enteramos que llegó al cine de casualidad, que ha hecho de todo el joven actor.
Amenábar y Agora se han llevado el guión original(muy merecido), mejor fotografía, mejor dirección artística, Mejor sonido y todos los premios técnicos.
Entre las actrices destacar a Lola Dueñas que como protagonista gracias a "Y yo también" ya deja de ser una de las eternas actrices secundarias de nuestro cine.
Me ha gustado el discurso de Alex de la Iglesia: hay que mejorar y exigirse más...qué razón tiene.
Momento para la retina cinematográfica el Goya de honor a Antonio Mercero. Toda la vida he seguido sus series, como cualquier españolito, y ha sido muy emocionante.
Pedro Almodóvar apareció de sorpresa para entregar el Goya a la mejor película. Y me alegro de una cosa: el director de la Academia de las Artes Cinematográficas, Don Alex de la Iglesia, se preocupa por el cine, y por las gentes del cine. Y eso se agradece. Porque en un discurso jamás se ha hablado en estas galas de los meritorios de rodaje, o de los figurantes. Trabajo en un sector que también tiene su crisis, faltaría más.
Alberto Iglesias vuelve a ser el músico premiado por la banda sonora Los abrazos rotos en esta ocasión, y entre la mirada de alegría de Daniel Monzón, la tranquila de Amenábar, o la emoción en los ojos de Antonio Resines, Maribel Verdú o Aitana Sánchez-Gijón se puede atisbar que el cine español resurge, que hay ilusión y talento.
Y que nos gusta hablar de Eduardo Noriega(el más guapo de la gala), que presentó premio junto a Belén Rueda. Que nos encantó el vestido de Cayetana Guillén-Cuervo, o que Alberto Ammann nos despistó con el nuevo corte de pelo.
O que Raul Arévalo ha sido premiado con el Goya al mejor actor de reparto por Gordos, y aquí desde sus inicios como actor le hemos seguido.
D
Dos grandes películas para recordar, para volver a ver. Vuelvo a insistir en lo que significa una cárcel donde Malamadre reina, y una ciudad en el siglo IV antes de Cristo donde la luz y la belleza riñen con politeístas y cristianos.
Y esperando nuevas películas como El mal ajeno, de Oskar Santos, dijimos hasta luego a Penélope y a Javier Bardem. Que todavía quedan los Oscar.