Desde estas líneas quiero reconocer la figura del Rey Juan Carlos, agradeciéndole su labor como Jefe del Estado, que ha ejercido esta magistratura durante casi cuarenta años. Ha sido el Rey de todos los españoles y ha representado a nuestro País en todo el mundo, cumpliendo fielmente sus obligaciones constitucionales.
Y ahora le sucederá el Príncipe de Asturias, como Felipe VI; una persona preparada, con gran experiencia diplomática, que habla varios idiomas y que conoce los problemas de España y de los españoles. Estoy seguro de que desarrollará una gran labor.
Creo que la monarquía es necesaria para España, como hemos dicho en otras ocasiones en Desde el Caballo de las Tendillas. La monarquía ofrece estabilidad a nuestra Nación; además de no tener vinculación con ningún partido político, algo que no ocurriría con una presidencia de la república. ¿Os imagináis al Presidente de la República española sin hablar idiomas, por ejemplo? El Príncipe de Asturias ha sido educado para esta tarea y, como su padre, ha conocido (y conoce) a casi todos los líderes internacionales, siendo los primeros de nuestros embajadores; por ejemplo, D. Juan Carlos ha conocido a todos los presidentes de Estados Unidos desde Kennedy.
Y ahora algunos nos quieren vender la república como si fuera la solución a todos los problemas, cuando eso no es así. Porque ahí tenemos a los países nórdicos, sociedades avanzadas y desarrolladas, con unas prestaciones sociales que son ejemplo para todos y cuya forma de estado es la monarquía.
Como decía ayer en Twitter, <<visto el pelaje de algunos de los que defienden la república, no tengo otra opción que apostar por la monarquía>>, además de por convicción, porque creo que es la forma de estado más adecuada para España. Y ahora un sector de la izquierda quiere aprovechar la abdicación para reclamar un referéndum que dé a elegir a los españoles entre monarquía o república; me recuerda a lo que ya ocurrió en 1931, cuando tras unas elecciones municipales se proclamó la II República; ahora quieren hacer lo mismo, pero tras unas elecciones europeas (deslegitimando a las actuales Cortes Generales y a la propia Constitución). Ese no es el camino. Estas personas lo tienen fácil, que se presenten a las próximas elecciones Generales y sigan lo establecido para modificar la Constitución; pero no, ellos quieren cambiar las cosas fuera de la Ley.
El caso es que hoy estoy contento. España tendrá un nuevo Rey, una persona joven, preparada y capacitada para esta importante labor. Espero que cuente con el apoyo y la lealtad de los españoles. Gracias D. Juan Carlos, ¡Viva Felipe VI!