Graffittis de Atenas: color y creatividad en tiempos difíciles

Publicado el 27 octubre 2013 por Nicopasi

Los orientales con su sabiduría ancestral aseguraron alguna vez que la crisis, además de un trauma, implica la posibilidad de cambio o de nueva oportunidad. Y esa idea es la primera que sobreviene cuando se camina por Atenas y se la ve tan colorida, llena de graffittis y repleta de manifestaciones artísticas en cada rincón que parecen ser el bálsamo perfecto para apaciguar los dolores de una de las peores crisis de la que haya tenido memoria el pueblo griego.
Como bien se sabe el graffitti es uno de los medios más populares a la hora de expresar sentimientos o comunicar diferentes mensajes, transformándose en verdaderos documentos de la época en la cual fueron creados. En este fotorreportaje verán algunos de los que hoy le dan color a la Atenas de la crisis, esa que parece alejada de los dorados tiempos de Pericles, del panteón de dioses protectores o de las épocas en los que el mundo los creía partícipes de la fortuna de Onassis. 
Verán que en la serie seleccionada los hay de diferentes estilos, realizados por artistas de diversas corrientes (que abarcan desde los militantes por diferentes causas hasta artistas plásticos consagrados) pero siempre, en cualquiera de los casos, se puede dilucidar mensajes profundos que, en esa forma de expresión, encontraron la mejor manera de exorcizar muchos de los demonios que los aquejan como integrantes de esa sociedad. 

La fachada y los balcones de este edificio de la Plaza de Monastiraki se transformaron en un gigante escaparate para promocionar una importante marca de ropa griega para mujeres. La explosión de formas y colores que componen la publicidad contrasta con las cúpulas de las iglesias ortodoxas y la Acrópolis, que secunda la zona como un verdadero centinela.

Zap51 (Alexandros Vasmoulakis) es uno de los artistas más importantes en este momento en Grecia. Su método de trabajo es la intervención de importantes edificios de Atenas y en las altas medianeras llevar a cabo sus pinturas, casi siempre de figuras femeninas con cierta tendencia al estilo publicitario y que -dada la magnitud de la obra- puede verse desde diferentes lugares del casco urbano en que aparecen. Debido al éxito del artista ya fue convocado para intervenir importantes edificios en ciudades como Londres, París y Estambul.

El famoso Hotel Classical de Plaza Omonia y esquina Avenida Athinai (famoso por estar ubicado en uno de los edificios mas modernos de la ciudad) también eligió hacer de sus balcones de acrílico un espacio para mostrar diferentes fotografías. Al ser un hotel internacional, el espacio brinda la posibilidad de cambiar las muestras fotográficas e ,incluso, usar ese espacio para ubicar diferentes publicidades.

El Barrio de Anafiótika (de las casas frente al Foro Ateniense) es el que mayor cantidad de graffittis y paredes intervenidas presenta. Allí reside la Fundación Melina Merkouri (dedicada a una delas artistas griegas más importantes del siglo XX y que llegó a ser ministra de cultura) y por eso, la zona está considerada como el barrio más bohemio de Atenas. Cientos de jóvenes graffiteros e incluso algún que otro artista plástico utilizan las fachadas de las casas como lienzo, siempre después de la aprobación de los dueños de las mismas, quienes sienten un verdadero orgullo de que sus casas sean elegidas para una intervención artística.


En diferentes puntos del centro de Atenas se pueden ver estos graffittis realizados por un colectivo de jóvenes feministas que plasman en ellos diferentes temáticas relacionadas con las cuestiones de género tales como matrimonio igualitario, aborto, violencia y la igualdad frente a la figura del hombre.



Este graffitti muestra a un niño con tristeza en su rostro a consecuencia de un recorte que hiciera el gobierno al presupuesto destinado a educación.

Venir caminando en medio de restos arqueológicos, columnas con miles de años y encontrarse con este graffitti es un golpe a la ensoñación que nos pone en eje nuevamente de los efectos de la globalización (Igualmente en ese caso, sea quien sea el que lo pintó, seguro que es un buen mensaje para el duro momento que atraviesan los griegos en estos momentos)
Figuras de cómic son las que mayor éxito tienen entre los graffitteros

Cualquier sitio es bueno para plasmar diferentes mensajes. Aquí la tapa del disco Erótica, de Madonna, en un macetero de la Avenida Syntagma a metros del Parlamento Nacional.

Cuando a los graffittis se les agrega texto en griego, para quienes no lo comprendemos, el mensaje no llega a decodificarse. Lamentablemente éste fue un caso. 

La figura de la patria con forma femenina aparece recurrentemente en los graffittis. En este caso aparece caricaturizada por uno de los colectivos graffitteros más importantes y que se alzaron como una fuerza política opositora, al menos desde el ámbito cultural.

Las figuras religiosas también forman parte del colectivo imaginario utilizado para plasmar graffittis. En este caso se puede ver la figura de un ángel de características coptas (sincretismo que surge de la unión de la iglesia ortodoxa griega y el catolicismo).

Aunque también la presencia de la iglesia es tenida en cuenta, en varias oportunidades, como una de las responsables junto, a las malas políticas del gobierno, de la terrible situación económica que atraviesa el país desde 2011.
Más información
Flickr de Zap51
Video de Cromópolis (El Arte callejero de Atenas)