Vi la última adaptación cinematográfica de la novela de Graham Greene hace ya la friolera de 13 años. Pese a ello su recuerdo -esa imagen de Michael Caine observando, sentado a una mesa del Café El Pavillon, un brutal atentado con explosivos- no se ha borrado en todos estos años de mi cabeza. Tenía una cita pendiente con el autor de la novela en que se basaba Phillip Noyce, el director de la cinta; debía una visita a Graham Greene.
Michael Caine es en el film de Philip Noyce quien da vida al periodista inglés Thomas Fowler que siempre ha presumido de mantener, como buen reportero de guerra que es, la neutralidad que se les supone a estos profesionales. Sin embargo, los acontecimientos vividos por él en Indochina durante los dos últimos años, le llevarán a tomar partido. Y es que ante el asesinato de inocentes es imposible e inaceptable querer estar fuera, no implicarse.
La historia que narra Fowler transcurre en 1952 en la Indochina Francesa (Camboya, Laos, Vietnam del Norte y Vietnam del Sur). Allí el Viet Minh de Ho Chi Min lleva luchando contra Francia, potencia colonizadora, desde 1945. Cuando parece que Francia tiene ya todas las de perder [la salida de los franceses sucede en 1955] los norteamericanos comienzan a intervenir más y más en la zona. Al principio lo harán de manera disimulada a través de la ayuda económica y médica. Así Alden Pyle ( Brendan Fraser en el film de Noyce), coprotagonista de la novela, aparece en Saigón dentro de una legación norteamericana que viene a combatir el tracoma, aunque pronto se verá que sus actividades, amistades y desplazamientos por la zona poco tienen que ver con este problema oftalmológico. Junto a la actitud de Pyle, Fowler observará que cada día al puerto de Saigón llegan más cargueros con aviones de guerra estadounidenses.
En esta fase de inicio de cambio de potencia (los EE UU iniciarían la intervención directa en el conflicto vietnamita a partir de 1955) estos dos hombres se enfrentarán dialécticamente por su idea sobre el papel de los europeos (Fowler y los franceses) y los americanos (Pyle) en esta zona asiática. Para Pyle hay que liberarla del colonialismo e instaurar una democracia nacional que impida que caiga en las garras del comunismo. Para ello, según politólogos americanos que no conocen la zona, hay que procurar la creación de una Tercera Fuerza que apoyada desde fuera (USA) consiga mover la voluntad de los vietnamitas y establecer un sistema democrático. Pero Fowler ve que esto no es tan sencillo:
"Somos viejas naciones imperialistas, Pyle, pero hemos aprendido un poco de realismo; hemos aprendido a no jugar con fuego. . Esta Tercera Fuerza... figura en los libros, nada más. El general Thé es, sencillamente, un bandido con unos cuantos miles de hombres; no es una democracia nacional " (pág. 211)
Estos son los mimbres que sostienen este magnífico relato organizado en 4 partes y que enhebra magistralmente la historia privada de los componentes de este triángulo amoroso con los sucesos del propio país donde esto sucede. Para ello el tiempo de la acción se desarrolla en contrapunto: una acción actual que investiga la muerte de Pyle; y al hilo de ésta saltos al pasado rememorando Fowler lo vivido por él junto a este norteamericano, descubriendo la verdadera personalidad de Pyle al tiempo que sus auténticas actividades.
La novela toca un montón de aspectos: la amistad entre dos hombres muy diferentes; el amor y la guerra; la inocencia de muchos de los combatientes; la increíble maldad presente en el conflicto bélico; la mentira y la verdad periodísticas; el colonialismo; la liberación, ¿a qué precio?; la sensualidad, el sexo y el desorden orientales vs la esbeltez, limpieza y lisura del deseo reprimido occidental; la juventud y la vejez; etc., etc.
➼"¿Cuántos coroneles muertos justifican la muerte de un niño o de un conductor de triciclo, cuando uno quiere construir un frente democrático nacional? " (p. 220)
➼"Yo no estoy implicado [dice Fowler a un capitán del ejército francés]
No es una cuestión de razón o de justicia. Todos nos vemos implicados en un momento de emoción y después no podemos evadirnos. La guerra y el amor..., siempre los han comparado.[...] Algún día ocurrirá algo que le obligará a decidirse por un bando " (p. 204)
➼"He llegado a una edad en que el sexo no resulta un problema tan importante como la vejez o la muerte " (p. 139)
➼"Tú, y los que son como tú, están tratando de hacer la guerra con la ayuda de gente que sencillamente no está interesada en esta guerra " (p. 125)
➼"Más tarde descubrí que Pyle sentía enorme respeto por los que él llamaba escritores serios. Esta designación excluía a los novelistas, poetas y dramaturgos, a menos que trataran lo que él denominaba un tema contemporáneo; y aún así era mejor leer la cosa directa tal y como la presentaba York." (p. 28)
reflexiona➼"York podía escribir sus abstraciones gráficas sobre la Tercera Fuerza, pero esto era la Tercera Fuerza en realidad, cuando uno la veía de cerca; esto era la Cosa " (p. 193) [Fowler tras una explosión con material plástico colocado en un aparcamiento de bicicletas .]
Además de la versión cinematográfica dirigida por Philip Noyce en 2002 y estrenada en España el año siguiente, la novela de Graham Greene había sido llevada anteriormente al cine en un film dirigido por el gran Joseph L. Mankiewicz en 1958, tan sólo tres años después de la aparición de la novela. En esta ocasion los papeles estelares estaban protagonizados por Audie Murphy ( Alden Pyle), Michael Redgrave ( Thomas Fowler), Claude Dauphin (inspector Vigot), y Giorgia Moll ( Fuong). El guión adaptado corrió a cargó del propio Mankiewicz. De ambos films es más fiel a la novela original el de Philip Noyce. En cuanto a premios y distinciones, la película de 2002 fue nominada al Óscar al mejor actor (Michael Caine); su director Philip Noyce obtuvo el National Board of Review; y el American Film Institute (AFI) la colocó en el Top 10 de Mejores películas del año.