Un reportaje de Marta Esnaola. Fotografías Iker Azurmendi - Viernes, 13 de Mayo de 2016 - Actualizado a las 06:14h
Obras de conocidos artistas como Miró, Dalí, Chillida y Antonio Saura, junto con otros creadores emergentes, llenan las paredes del Kursaal hasta el domingo. La III Feria de Arte Contemporáneo Donostiartean muestra obras de 300 artistas internacionales, representadas en un total de 32 expositores. El público podrá simplemente disfrutar del arte o adquirir obras cuyos precios oscilan entre los 100 y los 100.000 euros que cuesta la escultura que da la bienvenida a la feria, creada por el artista sudafricano Cornell Human.
El primer expositor del recinto, de la galería madrileña Gaudí, resume perfectamente lo que el visitante se encontrará: arte vasco, estatal e internacional, para todos los gustos. Por ejemplo, se puede contemplar una escultura del donostiarra Iñigo Arístegui, dedicada a los refugiados, pero también un grabado de Dalí y algún trabajo de Chillida. "Hemos traído varias cosas del italiano Paolo Collini, que es un artistazo", señala Marina López, trabajadora de la galería y miembro de la organización de la feria.
De las demás galerías, en el ámbito internacional López destaca al británico Clifton Fine Art, "que ha traído una preciosa serie con animales de Harry Bunce", y a Studio Ambre de Italia, "donde el galerista y artista Romeo Micheloto muestra obras muy puras de collage y lino". Por su parte, el galerista argentino Daniel Rueda exhibe una muestra del arte contemporáneo del oeste del país, con artistas como Dolores Zorreguieta o Alberto Thormann. "Queremos dar a conocer la provincia con artistas que han conseguido premios pero cuyas obras no tienen precios tan altos", señala.
La Michael K. Bell Gallery de Puerto Rico, por su parte, trae un interesante trabajo de Adrián Villeta y Amalia Pereira. "Él hace fotografía barroca, muy elegante, y yo trabajo el collage, por lo que decidimos hacer la serie Esperanza entre los dos; las fotografías son de Villeta y yo hago el collage, por lo que la propuesta es una fusión del trabajo de ambos", señala Pereira. "Es un ejemplo de fine art, aunque también mostramos trabajos individuales", agrega Villeta.
También habrá una gran presencia de galerías estatales. La madrileña Marco de Arco, por ejemplo, exhibe obras de gran calidad de Miró, Antonio López y Tàpies, con precios que en muchos casos superan los 10.000 euros. Por su parte, el granadino Ceferino Navarro ha optado por jóvenes de la nueva figuración. "Con estas pinturas y esculturas, quería romper con el academicismo, pero por otro lado también he traído a artistas consagrados que venden muy bien". El artista Jad, de Sitges, también ha optado por romper con lo habitual y presenta cuadros de luxury art: "Son obras que podrían estar en una joyería, de lujo, que ensalzan los objetos", señala el creador, que utiliza texturas y colores de materiales nobles en su medio centenar de creaciones.
La valenciana Nanda Botella tiene como base elementos más "humildes" como el barro y la madera. "Mi obra parte de una gran instalación, Vertebrados, formada por 4.500 piezas; he hecho réplicas más pequeñas e interpretaciones, respetando el color", afirma. Nada tiene que ver con la propuesta de la galería ovetense Cervantes 6, del galerista Juan Martínez, quien ha traído obras muy diferentes entre sí. Uno de los artistas es Joaquín Viña, que muestra cuadros de estética pop, e incluso ha traído tazas, alfombras y postales diseñados por él. El escultor oriotarra Iñigo Manterola participa con "obras ligeras de hierro y acero corten, que podrían definirse como dibujos en tres dimensiones". La representación vasca viene también de la mano de Iñigo Arístegui. "Destacaría la nueva serie No limits, con figuras de hierro dulce que escapan de los cuadros", apunta el artista, que también muestra obras de hombres "perfectos", pero "vacíos por dentro".
En cuanto a las galerías guipuzcoanas, participan dos: la zarauztarra Ispilu Arte, con obras muy coloridas entre las que destacan unos cubos de Mariajose y José Antonio Legorburu; y la donostiarra Vetus Art, con obras de Pablo Lambertos, Elena Barón y Jordi Ribes, entre otros.