Nada más lejos de la realidad, Street Fighter II cuenta con una versión original licenciada por Capcom para la consola Master System de Sega. Eso sí, el cartucho únicamente se llegó a comercializar en Brasil. No olvidemos que en este país la consola doméstica de 8 bits de Sega pudo disfrutar de un éxito arrollador, hasta el punto de que todavía se siguen vendiendo nuevos packs en las tiendas.Este fue el principal motivo por el que Capcom accedió a licenciar uno de sus títulos estrella a TecToy, en un lógico intento de aprovechar el tirón comercial en un mercado emergente.
Y hay que decir que, pese a no poder ser una buena conversión, el juego realmente aprovecha cada mega (algo que no sé si hacía mi querido cartucho de Mega Drive).Como es comprensible, en esta adaptación del juego no fue posible mantener a toda la plantilla de personajes original de Street Fighter II. Los desarrolladores tuvieron que escoger, y lógicamente optaron por salvaguardar a los que la mayoría considera más carismáticos o destacables. Así pues, podremos encontrar a Ryu, Ken, Chun-Li, Guile, Blanka, Sagat, Balrog y Bison. Quedan fuera de juego Edmond Honda, Vega, Zangief y Dhalsim, personajes que por su tamaño, velocidad o características particulares podrían suponer un mayor esfuerzo a nivel de programación.
Respecto al sonido, también fue necesario simplificarlo al máximo. A pesar de ello, y pese a la diferencia de calidad, no hay ningún problema a la hora de identificar las melodías propias del escenario de cada personaje. Pero si hay que destacar un aspecto negativo en cuanto a los efectos, habría que comentar el sonido de los mamporros. Después de unas cuantas partidas resulta infinitamente repetitivo, llegando a ser bastante irritante.Muchos de los movimientos de los personajes también se vieron obligados a ser recortados y limitados con respecto a las versiones de Mega Drive o Super Nintendo. Esta es una consecuencia lógica no sólo a las posibilidades de la consola, sino también al propio control pad. Así pues, por poner un ejemplo, Ryu y Ken tuvieron que quedarse sin poder realizar el ataque del dragón. Recordemos que el mando de la Master dispone tan sólo de dos botones, y el control direccional estaba muy limitado en comparación con controles más modernos. En cualquier caso, en esta versión esto no supone un gran problema a la hora de jugar.