Grandes guerreros - Barbaros

Por Depatia

Canal Historia, nos ofrece estos tres documentales de los guerreros más crueles y sanguinarios que han existido hasta nuestros días.


Los Godos
Aterrorizados por los hunos, los godos buscaron su salvación en el Imperio Romano, pero los confinaron como esclavos. Aunque conservaron sus armas, se amotinaron y se dedicaron al saqueo.
Ver Documental
Los Vikingos
Con el ataque brutal y repentino a un monasterios inglés en el año 793 A.C. los vikingos empiezan a repartirse rápidamente por Europa. No fue hasta que una flecha atravesó la garganta del gran rey vikingo Harald Hardrada que la violencia remitió. Para entonces su temple como guerreros y exploradores ya había dado pie al comienzo de una nueva época.
Ver Documental
Los Mongoles
Los pueblos mongoles pertenecen al amplio grupo de pueblos mongoloides, del que también forman parte chinos, japoneses, coreanos, thais, etc. Su medio geográfico configuró una forma de vida nómada, basada en el pastoreo de cabras, ovejas y caballos, muy similar a la de otros pueblos esteparios, como los turcos y los tunguses (manchúes), con los que también comparten una filiación lingüística (lenguas uralo-altaicas). Parece que su hábitat original se situaba en las llanuras al sureste del lago Baikal, aunque algunos grupos se extendieron al norte del mismo, en la taiga siberiana, donde vivían de la caza. Su forma de vida motivó la extremada sencillez de las sociedades mongolas. Agrupados en tribus, vivían en tiendas que transportaban consigo en sus desplazamientos en busca de nuevos pastos, no practicaban la agricultura ni tenían ciudades o asentamientos permanentes. El chamanismo y la veneración de los fenómenos naturales constituían sus principales prácticas religiosas.
Estas circunstancias motivaron el que los mongoles raramente fundaran Estados, aunque se dieron algunas excepciones. Como otros pueblos nómadas, los mongoles eran excelentes arqueros y jinetes. Convertidos en una fuerza guerrera, su extremada movilidad y velocidad hacía de ellos una seria amenaza para cualquier ejército. Gracias a ello consiguieron fundar efímeros Estados en diversas épocas, como el reino de Yen (siglo IV), el imperio juan-juan (siglos V y VI) o el de los kihtan (siglos X y XI) al norte de China, o el de los kara-kitai (siglos XI y XII) en Asia Central. A causa de la inestabilidad interna y de la presión de otros nómadas, frecuentemente azuzados por el imperio chino, estos Estados solían desaparecer rápidamente, y las tribus mongolas volvían a su existencia errante.
Ver Documental