Si tuviera que elegir entre uno entre mis imprescindibles de maquillaje, sin duda, me quedaría con la máscara de pestañas.
Con un sólo toque es capaz de cambiar la expresión del rostro. Pasar de una mirada triste a una mirada expresiva e intensa.
Y si hay una firma que sabe de máscaras de pestañas esa es Lancôme que lleva años innovando para transformar nuestra mirada.
De hecho, hace unos meses os anunciaba que Hypnôse, una de las máscaras de pestañas más emblemática y best-seller de la firma, cumplía 10 años.
Y, en su constante innovación, Lancôme da un paso más con la creación de Grandiôse que llega para facilitarnos la tarea de maquillarnos inscribiéndose así en la tradición del effortless chic a la francesa, en el corazón de los valores de Lancôme.
Pero, ¿qué hace única a Grandiôse?
Su diseño.
Hasta el momento debíamos hacer maniobras para maquillar los dos ojos llegando a todas las pestañas (pasar el cepillo por encima de la nariz, girar la muñeca para llegar al ojo opuesto a la mano que aplica la máscara y cambiar la máscara de mano).
Por ello, Lancôme investigó hasta dar con la clave y así creó la primera varilla Col de Cygne™ corta y con curvatura que se adapta de forma intuitiva a los contornos del rostro, evitando los pómulos, la nariz y la línea de las cejas para maquillar simétricamente ambos ojos.
Basta con un giro de muñeca para llegar a cada uno de los rincones del ojos.
Y además conseguir llegar a todas las pestañas maquillándolas de las raíz a las puntas, separándolas y aportando intensidad a la mirada gracias a sus pigmentos Ultra-Black.
Desde luego, a mí esta máscara de pestañas me tiene enamorada.
Antes usaba Hypnôse pero, desde que la he usado, se ha convertido en mi favorita.
Y es que Grandiôse de Lancôme marca un antes y un después en el maquillaje de ojos.
¿Os atrevéis a dar el paso?
Grandiôse de Lancôme, la evolución de la máscara de pestañas
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