¿Podemos hablar de algo más agradable? Roz Chazst (traducción de Rocio de la Maya)Penguim Random House | Sello: Reservoir BooksTapa dura | 240 páginas | 26,90€
Roz Chast dibuja y escribe esta novela gráfica en la que homenajea a sus padres, profundizando en sus raíces y mostrando de primera mano el paso a la decadencia de la vejez. A través de viñetas, la autora nos narra la historia de la llegada de sus abuelos a EEUU, de cómo nació y cómo fue su adolescencia, en quien se convirtió, y de cómo vivió los últimos años de sus padres. El libro sobre todo se centra en el amor profundo entre sus padres, un par de seres co-dependientes hasta en sus peores momentos de decadencia tanto física como mental.
Realmente me ha removido un poco por dentro y me ha hecho replantearme como viviremos esos años que tarde o temprano llegaran, tanto en la situación de hijo como en la de padre. Está claro que hablar de la muerte o el fin de la vida nunca es una temática agradable, y de ahí surgió el título de esta novela gráfica que sus propios padres le dieron; ya que los ancianos no querían hacerlo nunca. A través de cierta clave humorista en su relato, Roz Chast, dibujante e ilustradora de The New Yorker, se alzó en 2014 con el premio de la National Book Critics Circle Award, en la sección de Autobiografía por esta novela gráfica.
En este primer volumen que recopila los dos primeros capítulos publicados originalmente en Francia, cerrando su primer ciclo, se nos presenta Aspic: Detectives de lo desconocido, con guión de Thierry Gloris y poniéndonos al servicio del color de Jacques Lamontage. La historia nos transporta al París del siglo XIX, donde el veterano investigador Auguste Dupin recibe el encargo de averiguar la desaparición en extrañas circunstancias de la médium Kathy Wuthering. Junto a él, tendrá como aprendiza a Flora Vernet, una mujer adelantada a su tiempo, que se encargará de investigar el aparente robo de un reloj de bolsillo a cargo de Hugo Bayle, un caballero amante de la noche parisina que oculta un arduo secreto sorprendente.
Bebiendo puramente de las historias detectivescas de Arthur Conan Doyle, y dotando de una ambientación al puro estilo de Edgar Allan Poe (el mismo Dupin es protagonista de alguno de sus relatos), nos llega esta historia entretenida, llena de aventuras y con algunos giros sorprendentes dignos del mejor misterio. La novela gráfica tiene un inicio muy potente, poniéndonos en desarrollo rápidamente sobre las pistas, obligándonos a centrar nuestra atención en los detalles y dándonos los hallazgos necesarios para cerrar y entender la historia. Además el ritmo es perfecto, obsequiándonos con la capacidad de sorprendernos sin conseguir anticipar exactamente lo que va a suceder.
Por último, comentar un poco de su aparto gráfico a cargo de Lamontage, realmente ejecutado con maestría y queno desentona nunca como recreación de la época. Verdes y rollas chillones inundan las páginas, acompañando personajes y expresiones muy bien perfiladas. Además abundan las referencias al París de la época y a la literatura universal en pequeños detalles que pueden escapar a nuestra vista, si no nos fijamos. Pasen, vean, investiguen y acompañen a estos detectives en una fantasmagórica y espectral aventura.
¡Muchas gracias Reservoir Books y Yermo ediciones por los ejemplares!