`Green Hornet´ -un Seth Rogen exasperante consigue aburrir al personal. O por lo menos a mí-

Publicado el 03 junio 2011 por Cinefagos

 

Green Hornet era la adaptación cinematográfica de la serie con mismo título. Probablemente lo mejor de ella fue que el maestro de las artes marciales, Bruce Lee, la coprotagonizaba. No es la primera, ni será la última, que se adapte una serie famosa. Algunas veces (probablemente las que más) sale una cosa infumable, mientras que otras llega a convencer al personal (que es cuando el espectador disfruta como un enano).

La que protagonizan Cameron Díaz y Seth Rogen me aburrió soberanamente. Sobre todo por culpa del actor de Lío Embarazoso, el cual repite por enésima vez un papel exasperante e irritante.

En parte parece que estamos viendo una versión modificada de Bruce Wayne/ Batman. Un tío que acaba heredando una fortuna y que con el gran apoyo de su “mayordomo” acaba conbatiendo el crimen de su ciudad. Vale, ahí acaban los paralelismos realmente. Si el personaje creado por Bob Kane es inteligente y utiliza tanto sus habilidades físicas como detectivescas en la caza y captura de criminales, aquí Britt Reid (Rogen) es un patan de mucho cuidado. Precisamente la comicidad de la historia y de las situaciones está fuera de toda duda desde que empieza la película.

La primera aparición de Christoph Waltz enfrentándose a un jefe criminal emergente es posiblemente lo mejor de la película. Una vez pasado eso, como digo justo al comienzo, parece que la cosa va sin frenos y corriendo el riesgo de un trompazo estrepitoso.

Si alguna vez nos hemos encontrado con un personaje histriónico y pesado, cargante y coñazo, Rogen nos lo recuerda. Acaba siendo un Jim Carrey sin gracia, con diálogos y frases que no hacen si no desmostrar que la comedia que quieren ofrecer no llega a albergar dicho adjetivo. Ni sus enfrentamientos con su mano derecha Kato (Jay Chou) llegan a hacer esbozar una sonrisa, por más que lo intentan.

Cameron Díaz está más perdida que un multimillonario en la fila del paro. Total e irremediablemente desconocida. Sin gracia alguna y echando en falta esos momentos tan divertidos que suele ofrecer (aunque también se repite más que la cebolla y siempre es de agradecer que protagonice películas como The Box). Al final acaba siendo un mero reclamo de cara a sus fans, el cual acaba decepcionando en cuanto te das cuenta que pinta bien poco en la historia.

Sin embargo, una de las cosas buenas que tiene esta cinta, es su acción. Dosificada, eso sí. Donde Kato protagoniza los mejores instantes emulando al primer actor que encarnó dicho personaje, Bruce Lee. Aplausos varios hacia los encargados de la coreografía y algún que otro momento divertido.

Si de algo me alegro es de no haber pasado por taquilla. Haber aguantado casi dos horas en el cine y haberme preguntado si había cometido algun pecado por el cual estaba pagando en esa ocasión. Por un momento pensaba en acompañar a Kiefer Sutherland en su confesión con John Hurt en la serie The Confession. Pero sé a ciencia cierta que dicho sufrimiento, al mío me refiero, no tenía una equivalencia a lo que pude hacer.

¿Es para pasar el rato? A mí se me hizo eterno la verdad, con eso digo todo. Ojalá Seth Rogen sepa cambiar de registro alguna vez, tan sólo pido eso.