Grito
de Mujer Miami – 2013: Poesía y Realidad
en un solo acto
Por Pilar Vélez
Miami, 24 de marzo de 2013. Con una asistencia de por lo menos 200 personas, se
llevó a cabo el 3er. Festival Internacional de Poesía “Grito de Mujer” – Miami
2013, convocado localmente por la Asociación Internacional de Poetas y
Escritores – Capítulo AIPEH Miami y la Universidad de Miami, Department of
Modern Languages and Literatures.
El Festival Grito de Mujer - Miami,apoya a la fundación “Entre Nosotras – Mujeres
ayudando a Mujeres”, organización que ofrece asistencia a mujeres,
hombres y niños que han sido víctimas de la violencia doméstica en nuestra
comunidad.
Mediante la donación de
libros, comestibles y diferentes objetos que son donados por voluntarios; el
festival sirve de marco para generar fondos en favor de los programas que
adelanta la fundación. En esta oportunidad, los fondos recogidos serán
invertidos en el programa de prevención para niñas y adolescentes que María
Mercedes Becerra, presidenta de la fundación, ofrecerá de forma gratuita este
verano.
La agenda del festival reunió a los poetas en una sola voz. Sus
sentidos poemas nos trasladaron a dimensiones en los que el hombre fue visto
sin tapujos, como víctima o victimario. La fuerza poética desarraigo las
palabras y evidenció esos sonidos que parecieran no existir, pero que son un
sinnúmero de manifestaciones de violencia que amenazan con el exterminio de la
especie y del planeta; como lo hizo notar el escritor colombiano Janiel Humberto Pemberty, y que luego
fue evidenciado en el poema “Monologo de Hawa”
de la doctora Mecker Möller, cuando
nos decía que existían pueblos que contaban la vida en noches. “Violencia en decibeles”, tema central
del primer recital, unió en un acto las caras del hambre, la ambición, la
barbarie, el abuso de poder, la indiferencia, la deshumanización, que convergen y amenazan la sostenibilidad de la
vida.
Los poetas y el público fueron parte de un proceso de disección de la mujer a través de la
poesía, que sirvió de instrumento para desmembrar
algunos de los grandes males que la aquejan por los siglos: la discriminación,
el sometimiento, el maltrato y el abuso. La poeta Ana C. Blum, invitada al
Recital “Violencia en decibeles”, tomó el timón de esta causa y desvistió a la
mujer de los tabúes y mitos -pesados
ropajes- con los que la civilización la ha vestido. Su voz rebelde en “Majadera” y “Hoy les canto a ellas”, fue una exigencia a la libertad que debe
gozar cada mujer para escoger su identidad y su destino.
Un segundo recital, “Poetas por la Paz”, de libre participación, recibió el respaldo de
talentosísimos poetas provenientes de diferentes países y contribuyó con unos
enfoques de gran valor; pues aunque el título de este recital tenía una
dirección, muchos de los poetas denunciaron con su poesía las consecuencias de
la violencia y de sus aliadas la indiferencia y el silencio. Ariel
Aboal, por su parte, nos recordó que el mejor regalo que podemos dejarle a
las nuevas generaciones es la paz y Ada Bezos con “Paisajes imaginarios”, invita a una reflexión sobre la historia de
la humanidad sin guerras y desastres. Otros poetas reconocieron en sus obras,
la catarsis, el dolor y la desesperanza, como lo indica el poema “Falta” de la
poeta Margarita Rosa Pedrozo, en su última línea: “¡Puede ser… que nada me haga falta!”. La poeta deja entrever la
inseguridad del ser humano, la incertidumbre hacia la plenitud. Escuchamos poemas
que nos hicieron recapacitar sobre la
discriminación racial, como “Vulgata
Latina”, de María Augusta Montealegre; los problemas sociales, como el “Delincuente” de Azucena Rodas y la
violación infantil, en el poema “Cuerpo
pretérito de escarcha y filo” de Yenilen Mola. Los dos recitales “Violencia en decibeles” y
“Poetas por la Paz”, fueron vertientes que desembocaron en un mismo mar, en el
que la paz naufraga a la deriva.
Una serie de testimonios inesperados por parte de algunas mujeres
de la Fundación Entre Nosotras, hicieron que las figuras poéticas tomaran
cuerpo y se personificaran en cada una de ellas. Cinco valientes mujeres le
dijeron al mundo, “Sí la violencia existe
y nosotras hemos sido víctimas y estamos saliendo adelante”. Una de las
mujeres, no podía contener el llanto, hacia solo unos días que había sido
rescatada de un shelter, lugar al que
había acudido para escapar de su cónyuge. Fuimos testigos de la tragedia; la
mujer apenas si tenía la fuerza para sostenerse en pie y declarar lo que estaba
viviendo. Mientras su voz se quebrantaba y toda ella reflejaba una profunda
angustia, otra de las mujeres que estaba a su lado le tomó la mano y le dio
ánimo para que no desfalleciera. Sin ser un acto planeado, la realidad de Grito
de Mujer, fue contundente.
El festival contó con la
participación del canta autor Victor Romero, quien con un talento incomparable -voz,
mensaje, carisma- deleitó al público con temas de su autoría.Así mismo, hay que destacar las dos grandes
poetisas e invitadas especiales: Milagros
Terán, de Nicaragua, y Marie Whitman, de los Estados Unidos.Terán compartió varios de sus poemas con los
que sembró sonrisas y ensueños. Su poesía ligera, suave, melodiosa, profunda, se
conecta con el ser de una forma natural. “Poemas
de una niña”, fue un bálsamo poético en la tarde. La poeta Whitman, recitó
su poesía en inglés y fue traducida al español. Lapoeta ofreció un repertorio con una temática
diferente; sus poemas se centraban en los
conflictos juveniles, y en la trascendencia de estos en el desarrollo de las
personas. Su voz musical acompasaba con nitidez el tema. Sus poemas se degustaron
palabra por palabra, nota a nota.
Definitivamente
el idioma no fue una barrera para apreciar su talento.
La agenda del festival
transcurrió en un ambiente solidario, en el que el espíritu poético de los
participantes fue el protagonista de la noche. Lo mejor de la poética de esta
ciudad se hizo presente; por lo que extendemos la invitación a aquellos poetas
que todavía no han experimentado LO QUE ES UN GRITO DE MUJER!!!!
Gracias por sus aplausos!! Nuestras Poetas lo merecen!