A veces tenemos miedo a decir no y por eso decimos sí son hacer nada, con la esperanza que la otra persona olvida lo que has prometido. David Sánchez explica cómo GTD ayuda a decir “No”:
el valor que aporta GTD es la “incomodidad” de tener que hacerte preguntas y de obligarte a que las respuestas sean sinceras y claras. Puedes engañarte a ti mismo, pero no puedes engañar a GTD. Puedes mentir al responderte a las preguntas que GTD te plantea, pero lo bueno de GTD es que, antes o después, te dará la alarma indicándote que, por donde dices que vas no es por donde quieres o debes ir.