Guerra a la inmersión.

Publicado el 01 septiembre 2016 por Torrens

El absurdo conflicto por la inmersión lingüística en Catalunya, se ha reavivado con el pacto entre Rajoy y Ribera pero hace años que se inició con el plan anti Catalunya de Aznar y Rajoy, y me sugiere dos claras opiniones críticas, una sobre los atacantes y otra sobre los defensores.

A los atacantes les importa un bledo y medio la eventual mejora de la educación en Catalunya o los derechos de los pocos padres que exigen que sus hijos sean educados en castellano. Saben que la inmersión lingüística no es un método de ataque al castellano sino de defensa del catalán, y precisamente por esto quieren acabar con ella, porque el objetivo de Rajoy, Rivera y los que les apoyan en el tema de la educación en Catalunya es perjudicar al máximo al catalán, a poder ser hasta su eventual desaparición, o como le dijo la reencarnación de Isabel la Católica nacido en la Rioja que se llama Francisco Caja a Alberto Rivera “hacer que el catalán regrese a 1978”, por culpa del maldito racismo lingüístico que desde el inicio del imperio castellano se ha practicado en España.

Por otro lado los defensores o son ineptos o ignorantes o las dos cosas porque se han prestado a mantener el desconocimiento general en toda España, incluyendo la propia Catalunya, de dos muy significativos detalles que por sí solos destruyen toda argumentación contra nuestro sistema educativo, y que cada vez que se produce un ataque a la inmersión lingüística deberían estar repitiendo de la forma más machacona posible, entre otras razones porque el negar lo evidente ya es una característica básica de la política española, en especial en partidos como los de Rajoy y Rivera.

El primer detalle está explicado en detalle en el artículo de La Vanguardia de septiembre de 2011 que podéis leer haciendo clic en el siguiente link:

http://www.lavanguardia.com/politica/20110908/54212920710/la-eurocamara-alerta-que-separar-a-los-estudiantes-por-lenguas-seria-separar-el-pais.html

En el artículo queda muy claro que tanto el Parlamento Europeo como la Comisión Europea no solo han dado su aprobación al método, incluso con informes aprobados en el pleno de la Eurocámara, sino que lo consideran el método perfecto para casos como el de Catalunya, y lo recomiendan para países con casos similares, entre otras razones porque también es el método aconsejado por los mejores expertos en pedagogía.

El segundo detalle sería útil para rebatir comentarios de muchos miembros del Ku Klux Klan lingüístico del PP y C’, en el sentido que la inmersión lingüística es una malintencionada invención catalana que pretende reducir al máximo la utilización del castellano en Catalunya, pero resulta que la inmersión lingüística se aplicó por primera vez en países escandinavos en los años 20 para proteger idiomas locales minoritarios y sin que ni un solo catalán interviniese en el acontecimiento, desde entonces se ha producido alguna otra aplicación del método siendo la más importante la del francés en el Quebec en Canadá en los años 60, al que, al contrario que en España, el gobierno canadiense de Ottawa y todos los partidos en su Parlamento dieron todo su apoyo.

Los catalanes en cuanto al sistema educativo estamos entre unos cafres que han inventado el Ku Klux Klan lingüístico y unos despistados que en este asunto no se enteran de nada.