Hasta el día 25 de julio se celebra en Córdoba el Festival de la Guitarra que cada año reúne a los mejores virtuosos de este instrumento.
Comenzó siendo un festival de cariz flamenco, pero con los años adoptó el lenguaje de otras músicas. Ahora cumple treinta años, es uno de los eventos internacionales más importantes de cuantos se celebran en Andalucía y lleva tiempo abriendo las puertas de la ciudad al jazz, el blues, el pop y el rock.
Está previsto que el domingo, día 25, el festival lo clausure Mark Knopfler, el líder del grupo británico Dire Straits.
Estos días en Córdoba hace mucho calor. Esa es la verdad. Pero a la caída de la noche, los distintos escenarios por los que está repartido el festival hay un frescor de músicas que alejan las altas temperaturas.
Acercarse a ellos es un modo singular de conocer la más histórica de las capitales andaluzas, dos veces capital del mundo y dueña de uno de los patrimonios monumentales más excelsos de Europa.
La ciudad califal, la ciudad bañada por el Guadalquivir, tocada por el halo mágico del más refinado orientalismo, vuelve a convertirse esos días de julio en epicentro de todas las miradas. (El Mundo)