Axl Rose a lo largo de estos años ha estado escupiendo sin parar pestes sobre la improbabilidad de una reunión de los Guns And Roses originales, pero también es verdad que los años amansan las fieras y las hacen ver el destino de otra manera.
Lo que en un principio siempre ha sido un NO rotundo por parte de Axl Rose hace unos días cogió un tinte más filosófico que real en cuanto a la hipotética reunión y más con la explicación que Axl dio en una reciente entrevista:
“Cada grupo puede hacer lo que quiera, porque en cada grupo hay unas razones para hacerlo. Yo como cualquier persona puedo opinar y valorar esas opciones porque no es mi banda, y no me afecta tanto como si se tratara de la mía. En cuanto al dinero me ofrecieron muchísimo para volver a armar la formación original pero en la vida todos tenemos prioridades, principios, moral o compromisos. Entiendo la romántica idea de vernos de nuevo juntos después de tantos años separados, pero cuando he visto a bandas que lo han hecho, siempre he visto ese algo que parece perdido. No ha habido manera de hacer una reunión de Guns N Roses porque por encima de intereses siempre he pensado que ponía en peligro mi bienestar y los intereses de GNR, incluido yo mismo.
Los Guns And Roses de ahora hemos invertido mucho de nuestra vida en esto, hemos trabajado muy duro para conseguir lo que tenemos y mantenerlo. Yo sé lo que pasó entonces y todo lo que he tenido que pasar desde la separación. La gente disfruto en aquel momento de lo que hacíamos y nuestras vidas eran una locura. No es un lugar al que me gustaría volver de nuevo, porque la vida es demasiado corta”.
No hay manera que esto vuelva a suceder, pero esta vez al menos da unas razones de peso, mucho más allá de los cheques, de las presiones de los fans y del interés del negocio de la música… al menos reconoce simplemente él no quiere volver donde estuvo.