Ha llegado el invierno arabe

Publicado el 09 julio 2013 por Eduardocarranzagazzani @ElPeriodicoPeru

Media Columna de Jorge Morelli. (Blog de Jorge Morelli).
HA LLEGADO EL INVIERNO ARABE. 

El golpe de Estado en Egipto no debería sorprender a nadie y tampoco el que , de la primavera árabe, no estén naciendo ninguna democracia. Lo sorprendente es, más bien, que a una institución de análisis como la estadounidense Stratfor le llame la atención que el descontento de los egipcios no fuera por falta de una democracia constitucional.

“No ha cambiado el régimen o la arquitectura fundamental de la política egipcia –se queja-. Los militares siguen siendo la fuerza dominante, y si bien están preparados para moldear hábilmente a Egipto, lo importante es que seguirán moldeando a Egipto”, concluye su informe. Qué comerán, que adivinan.

Si un gobierno débil entre dos extremos polarizados -la revolución islámica y el autoritarismo- no tenía ninguna posibilidad, menos aún la tenía un gobierno débil de uno de los extremos fundamentalistas –los Hermanos Musulmanes- frente al Ejército egipcio -laico y profesional- que ha gobernado el país desde siempre.

La primavera árabe debió dar paso inmediatamente a la construcción de instituciones para la gobernabilidad democrática, como el equilibrio de poderes y la subordinación de la fuerza armada al poder constitucional. Pero pasó la primavera -y también el verano y el otoño- cantando la cigarra loas a las libertades políticas y ahora llega el invierno y ninguna hormiga hizo el trabajo.

La crisis económica no es explicación ninguna. Al desgobierno no le hacen falta crisis venidas de fuera. Genera sus propias crisis con su incompetencia dictar políticas públicas que respondan a las oportunidades. La crisis rara vez viene de fuera con fuerza imbatible, casi siempre nace de la incapacidad de respuesta.

El Ejército continúa siendo el “árbitro último del poder en la política egipcia”, comprueba Stratfor. Morsi no perdió, pues, el poder, la verdad es que nunca tuvo el poder.

La pregunta es entonces: ¿cuenta el nuevo gobierno con la capacidad de decisión política para construir las instituciones que den a Egipto una gobernabilidad democrática? Si la respuesta es no, ese antiguo y noble pueblo verá otra recaída en el autoritarismo y otra más hasta que el salto cualitativo lo ponga en el umbral de una democracia con equilibrio de poderes y subordinación de la fuerza. Con sus pobres herramientas, los tecnócratas jamás podrán hacerlo. Solo la decisión política de un gobierno fuerte lo logrará.

Sin instituciones, las transiciones desde el autoritarismo no desembocan en la democracia, sino en la violencia, escribió Samuel Huntington hace décadas.

La democracia egipcia es de la especie que pertenece al género de las repúblicas demagógicas. Cualquier parecido no es pura coincidencia.

FUENTE: BLOG DE JORGE MORELLI. http://www.expreso.com.pe/blogs/jorge-morelli