Había miedo entre el sonado cambio de fechas y la temida conversión a 3D, pero finalmente la secuela de G.I. Joe ha cumplido de sobra en taquilla recaudando a nivel mundial 132 millones de dólares en su primer fin de semana de andadura, dos más de lo que ha costado oficialmente (si no tenemos en cuenta la publicidad tirada a la basura tras el cambio en la fecha de estreno). Por supuesto, para que la película comience a ser rentable ha de duplicar esa cifra. Según las previsiones lo hará, llegando incluso a los 400 -cien más que su predecesora, que además costó 45 millones más-, de ahí que Variety asegure que en Paramount ya planean la tercera entrega.
Yo aún no he visto G.I. Joe: LaVenganza, pero la crítica USA no ha sido demasiado benévola (42/100 en Metacritic).