Haciendo galletas en Ikea

Por Mamastodoterreno @MTodoterreno

En tiempo de recesión económica, alto índice de paro y recortes por donde mires, no hay mucha esperanza de que una tarde fuera de casa con tus hijos sea divertido y para colmo gratuita. Entretener a unos niños activos con algo novedoso no es fácil. Pero gracias a IKEA hemos podido disfrutar de una tarde del viernes sin tener que gastar ni un céntimo. 
Yo soy una fan y consumidora de la más que conocida tienda IKEA. Muchos de sus productos son prácticos, económicos y en líneas generales respetuosos con la familia y sobre todo con los niños. Yo veo que es una empresa que tiene muy encuenta a los niños.En sus instalaciones tienen zonas de juegos, ordenadores táctiles para que jueguen los niños mientras sus padres se deciden entre el mueble Hemnes o Besta para el salón. 

Pues paseándome un día por la página web de IKEA vi en el apartado de IKEA FAMILY unos seminarios y eventos especiales. Mire específicamente en la tienda que tengo más cercana y ofrecían un taller para niños. Era para hacer galletas. Inmediatamente le pregunte a los niños si quería que les apuntara a ir a un curso para hacer galletas y Sergio se animo. Julio sin embargo me miro con cara de pocos amigos y me pregunto. ¿Mami, un concurso? Yo no quiero ir a un concurso, por que siempre no gano. No pude contener la carcajada y le explique que era como una clase que le iban a enseñar a hacer galletas. A lo que el, sin pelos en la lengua me dice, yo ya se hacer galletas. Las hago contigo. Pero igual se animo a participar y los apunté a los dos. Lo apuntamos en el calendario y marcamos como evento especial. 

Nuestra experiencia fue buenísima. Las dos monitoras eran encantadoras, pacientes y muy joviales. Aunque había mucha diferencia de edades entre los niños llevaron muy bien la organización y le daban a cada uno su tiempo y lugar en el seminario. 


Los niños se lo pasaron genial y se llevaron a casa sus galletas para disfrutar su gran hazaña. Salían contentos, orgullosos y satisfechos de su trabajo. Sinceramente como madre eso no tiene precio. 
Siento mucho la mala calidad de las fotografías pero mi obsoleto telefono movil no daba para mucho mas. 
Rebecca