Ya esto se pasa de castaño oscuro y compañías que parecían que habían aprendido la lección vuelven a no tener la suficiente seguridad que les pueda permitir mantener una estructura de esas dimensiones de manera segura y eficaz. Al menos, o eso parece, no se han obtenido ningún dato en lo referente a tarjetas de crédito, aunque sí podrían haber comprado servicios ofertados dentro de las plataformas de Sony con las cuentas hackeadas. Como diría nuestro amigo de Parque Jurásico: Los hackers, se abren camino...