Sombra será luz, el silencio en lloro. Una vida más.
Nacemos, vivimos y morimos. Es el curso de la vida al cual todos estamos confinados para siempre. Pero lo mejor de ese ciclo es comprobar como al nacer, un bebe va creciendo, dando sus primeros pasos, sus sonidos que dan pasos a las palabras, como aprenden a hacer cosas tan comunes como llevarse la comida a la boca. Y cuando crecen como aprenden a leer, a escribir, a hablar con los demás, algo que, aunque no saben a la perfección, estamos ahí para enseñarles la dirección correcta en cada paso, para que se equivoquen lo justo y enseñarles que un error solo es tal cuando no se corrige y mucho menos, si no se reconoce.