Según el servicio de Arqueología de Barcelona, mientras realizaban las reformas de la Rambla, localizaron restos de la muralla medieval que resguardaba la ciudad. Además, se está trabajando para excavar todo el perímetro del Portal de Trentaclaus. Ubicado en la calle actual de los Escudellers, que pasa la plaza del Teatre.
Es un descubrimiento que aporta información valiosa acerca de la estructura y extensión de esta muralla, que para su época reforzaron la defensa de la ciudad ante el ataque de invasores.
También hay que destacar que el equipo de arqueólogos destaca que esta muralla experimentó varias reformas con el paso del tiempo. Logrando adaptarse a las necesidades de cada época. Por su estructura descubierta destaca características de distintos periodos, lo que significa que modificada y fortalecida en distintas ocasiones.
Expertos comprenden mejor la configuración de la ciudad en la Edad Media
Este descubrimiento en el Portal de Trentaclaus, que corresponde a una de las principales entradas a la Barcelona, se caracteriza por ser verdaderamente emocionante. Cabe destacar, que este portal marcó innumerables momentos históricos en el que este descubrimiento ofrece a los expertos comprender mucho mejor la configuración y la vida urbana de la ciudad en la época medieval.
Muralla medieval documentada en planos
Cabe destacar, que esta muralla medieval se documenta en planos, pero lo nuevo de esto es que podrá excavarse en toda la extensión será un portal de entrada a Barcelona de la época medieval. Según explica la directora de la excavación, Irene Cruz “Se dice, pero no tenemos pruebas documentadas, que se llamaba Trentaclaus porque tenía treinta llaves, era la puerta de acceso al barrio de los ollers; en la época medieval en la calle Escudellers se concentraban todos los talleres alfareros.
Comenzó a construirse en un momento de gran tensión
Cuando la muralla comenzó a construirse fue un momento de gran tensión. Entre 1240 a 1285, Pedro el Grande, se reveló para hacer valer sus derechos sobre Silicia, retando al rey francés y al Papa. En este sentido, para prevenir un ataque francés solicitó protección urgente de Barcelona con muros de torres de madera y muros de tapia, excluyendo la parte del mar. De acuerdo a los detalles que ha dado, indica: “Era una construcción temporal. Fue el Consell de Cent quien terminó el conflicto, fortaleció debidamente la ciudad: fue una obra municipal”.
Portales existentes y otros nuevos como el Portal Nou en 1925
En esta nueva muralla se evidencia portales que ya existían como los de la Portaferrissa o Jonqueres, la Boqueria y otros nuevos como el Portal Nou en 1925. A principios del siglo XIV, la Rambla era parte del perímetro amurallado. Luego, la muralla atravesó numerosas renovaciones. Posteriormente, en 1357, el Consell de Cent tomó la decisión de reformarlas en vista del enfrentamiento entre Pedro el Cruel de Castilla y Pedro el Ceremonioso. Este acontecimiento tuvo lugar entre 1356 y 1369.
Dentro de estas innovaciones adquirieron tres canteras en la montaña de Montjuïc y reforzar el perímetro de lo que es actualmente la Ciutat Vella. Según explica Cruz “Podremos también documentar cómo se empezó a desmontar en 1860, cuando se decidió que las murallas debían derribarse para mejorar la calidad de vida de los habitantes de Barcelona”.
Restos de la muralla medieval: importante hallazgo encontrado
Dentro del hallazgo han encontrado las maravedíes, esto es un tipo de moneda de Isabel II que se remonta a mediados del siglo XIX. Estas excavaciones siguen en marcha y se mantendrán durante un año. Una vez finalice, todo se cubrirá y no llevará al museo. Esto significa que quien desee verlo deberá hacerlo mientras se mantengan las obras.
Asimismo, las autoridades locales se encuentran trabajando en planes para preservar importantes vestigios, de tal manera que el público aprecie este importante descubrimiento que hace parte de la historia de Barcelona. Por otra parte, cabe destacar que este hallazgo no solo enriquecerá el conocimiento histórico de Barcelona, también se espera que capte a turista e investigadores que deseen profundizar en la herencia cultural de la ciudad.