Hambre a borbotones (Álber Vázquez)

Publicado el 21 marzo 2016 por Bookworm
Sinopsis: 

"Hambre a borbotones" es una novela fascinante. Hay terror, hay una trama policial, hay comedia, hay luminosidad, hay amor, hay sexo, hay odio, lujuria y deseos de venganza. Hay, en definitiva, todo eso que nos gusta y que hace que el mundo gire y funcione. Pero en una Thermomix a máxima potencia. 

Un libro que bebe directamente de los pulps norteamericanos de principios del siglo XX, los mezcla con una buena dosis de telenovela venezolana y los salpica de abundantes lingotazos de Wes Craven, Patricia Highsmith, Andy Warhol y Sylvia Kristel. 

Ficha técnica: AQUI 

Empiezo a escribir esta reseña y aún no tengo claro cómo valorar la novela, la verdad. Por un lado me ha parecido estupenda y por otro me ha desagradado tanto en algunos momentos que no tengo muy claro que vaya a continuar con las otras dos novelas que vienen detrás ("Monstruoso corazón ardiente" y "La venganza del conejo loco") y que junto con esta formarán la trilogía "Carne roja". En realidad no lo tengo claro ahora, pero como ya me conozco, en cuanto me entere de que han publicado la segunda entrega y por aquello de no dejar las trilogías sin completar seguro que acabaré leyéndolas.

Empezaré diciendo que la novela es "impactante". Creo que no había leído nada parecido nunca. La trama transcurre en una ficticia ciudad llamada Centenario donde se desarrollarán a la vez varias subtramas y donde la cantidad de locos que allí habitan, le quitaría a cualquiera las ganas de hacer por allí una paradita.

Por un lado están Alicia y su hermano Ismael, dueños de una prestigiosa galería de arte en la que también trabaja Clara, amiga de ambos y que junto con Elías, padre de Alicia e Ismael, forman un peculiar grupo con unos gustos culinarios un tanto especiales. Todos ellos han sido capaces de ponerme los pelos de punta, pero especialmente Clara, que es la que me ha parecido que estaba más loca de todos. En cualquier caso, todos ellos esconden un peculiar y común secreto que nadie es capaz de sospechar, pero que en el caso de Clara, le cuesta mantener a raya. 

Por otro lado, en Centenario están apareciendo una serie de mujeres estranguladas, que traen de calle a la policía, aunque parece que se vislumbra la figura de un sospechoso y por último, alguien trama el secuestro de una joven, para exigir un rescate que solucione de por vida sus problemas económicos.

Distintas tramas que lógicamente acabarán por encontrarse y en donde no todos los personajes acabarán igual de bien o de mal. Lo cierto es que en esta historia todos en mayor o menor medida son culpables de algo y tener las manos manchadas de sangre no es en lo único en lo que coinciden la mayoría. Todos nos mostrarán su peor cara bien directamente o a través de sus pensamientos, mientras la imagen que dan "de cara a la galería" es totalmente opuesta a sus verdaderos instintos. Son capaces de parecer educados, correctos y elegantes y a la vez de realizar los actos más despreciables sin despeinarse. Evidentemente no he sido capaz de empatizar con ninguno de ellos y desde luego no me gustaría encontrarme con nadie ni remotamente parecido, pero tengo que reconocer que la novela me ha durado muy poco.

La historia, que arranca de una forma muy potente, resulta desagradable y seductora al mismo tiempo y a mí, aunque a veces con cara de verdadero "asquito", porque confieso que hay escenas duritas de asimilar, me ha empujado a seguir leyendo. La forma en que está escrita, atrevida, directa, coloquial y sin adornos, invita a no dejar el libro y a querer saber (y a la vez, no saber) un poco más de cada uno de estos pintorescos personajes, mientras ves que las cosas, a veces por casualidad, a veces a propósito, se van complicando y empiezas a sospechar que algo tremendo va a acabar pasando cuando todo "explote".

Una novela difícil de catalogar, en la que el misterio, la intriga, el miedo (no diría terror), la tensión, la violencia, el sexo, y el amor, entendido a veces, de forma muy "peculiar" componen una trama de mucha acción que no es apta para todos los públicos, pues tras su lectura, tan "gore" en algunos momentos, te quedas con una sensación de alivio por haberla terminado y a la vez de incomodidad por haberla disfrutado. Lo que está claro es que no dejará indiferente, para bien o para mal, a quien se anime a adentrarse en ella. 

Por cierto, me gustaría destacar la fantástica edición que de la novela han hecho desde la editorial Expediciones Polares, que me ha encantado.

Os dejo por aquí el Book  Trailer del libro y os deseo unas felices vacaciones de Semana Santa a todos. ¡¡Hasta la vuelta!!