Han pasado muchos años
desde la primera vez,
que una copla te cantamos,
guiado por nuestra fe.
Desde ese buen día, Madre,
ya no podemos faltar,
contra vientos y mareas,
venimos pa´que nos veas
a tus plantas a cantar.
Mirarte me hace llorar,
y tú nos mira riendo
pero sonries diciendo
cantarme todos los años,
así podréis alegrar
a mi pueblo pastoreño.
solo por ser Pastoreño
como lo has querido tú,
te pedimos Madre mía,
que en la iglesia y en tu ermita
nos bendigas con tu luz.
En esta tierra se canta
a todo lo que se quiere,
y a ti queremos, Pastora,
cantarte pa´ que te enteres
que eres tú la que nos guías,
y velas año tras año,
buscando la oveja perdida,
para unir a tu rebaño.